Alerta. La película El verano que vivimos puede provocar sobredosis de glucosa a todos aquellos que no estén familiarizados con el género melodramático. Componentes: azúcar, diálogos con intención poética, dramatismo, intensidad musical y una historia tópica. Os dejamos con la crítica de la película El verano que vivimos, uno de los estrenos que nos invitan a regresar a los cines en esta pandémica navidad.
Sinopsis
La película El verano que vivimoscuenta una gran historia de amor a través de dos líneas temporales. En primer lugar, Isabel (Guiomar Puerta) llega a la costa gallega en los años 90 para realizar unas prácticas de periodismo en el diario local. Allí, le encargan ocuparse de las esquelas. Todo coge más interés cuando llega una carta que un hombre escribe a su esposa muerta todos los años. Isabel localizará al hijo del autor de la carta y buscaran la historia que hay detrás.
Paralelamente en los años 50, se explica la historia de Gonzalo (Javier Rey). Él es un joven arquitecto al que Hernán (Pablo Molinero), su amigo, le encarga la construcción de una bodega en Jerez de la Frontera. Esta construcción servirá para celebrar la boda entre Hernán y su prometida Lucía (Blanca Suárez).
Crítica de la película El verano que vivimos
Warner Bros sigue en la línea de ‘Palmeras en la nieve‘ y nos trae a los cines la película El verano que vivimos. La producción está dirigida por Carlos Sedes y guionizada, nada más y nada menos, que por un total de seis guionistas (Ramón Campos, Gema R. Neira, Salvador S. Molina, Javier Chacártegui y David Orea).
Más de lo mismo
La película El verano que vivimos vuelve a explotar los clichés que han sido mil veces utilizados en las películas de amor. Así, construye una trama plagada de sentimentalismo y dramatismo demasiado empalagoso. Solo hace falta escuchar el barroquismo de los diálogos. Cada palabra que sale de la boca de los personajes pretende ser una frase lapidaria. Eso provoca que el texto se convierta en una cutrez, acercándose a la mala literatura. Puede que los seis guionistas no consiguieran ponerse de acuerdo (no es de extrañar), y decidieran tirar por lo clásico.
El conflicto de la narración se centra en un triangulo amorosos. Al mismo tiempo, combina dos líneas temporales. Dos tópicos más que gastados que caracterizan a los dramas románticos y que recuerdan demasiado a “El diario de Noah”. Además, la película El verano que vivimos replica el arquetipo de protagonista femenina que nunca podrá ser feliz. Si en los woman’s films de los 50 una mujer no podía alcanzar la felicidad por la falta de opciones, ahora hay una tendencia al exceso de opciones. Resultado, poner en evidencia las limitaciones que supone ser mujer.
Al menos hay imágenes bonitas
Aunque el guion sea flojo, hay que reconocer el gran trabajo del director de fotografía Jacobo Martínez. Las imágenes que presenta son de gran valor estético. Así, captura con gran belleza la costa gallega y los campos vinícolas de Jerez.
Se basa en una composición clásica de los planos, un uso de la luz con grandes contrastes y una paleta de colores cálida que realza el paisaje. Todo ello hace que la película sea más llevadera. Si no se disfruta la acción, se puede disfrutar de lo visual.
Un elenco de actores irregular
La interpretación de los actores del triángulo amoroso es remarcable. Blanca Suárez interpreta a la rompecorazones de Lucía Vega; Javier Reyencarna a Gonzalo, el arquitecto; y Pablo Molinero es el prometido de Lucía. Se trata de un trío equilibrado. Cada personaje esta dotado de unos matices y se complementan muy bien entre sí. La gracia andaluza de Molinero contrasta con la rigidez de Rey, y ambos se ven cautivados por la dulzura de Suárez.
Por otra parte, hay interpretaciones menos brillantes. María Pedraza se ve mejor que en sus anteriores papeles, pero no acaba de encontrar la gracia y picardía que podría extraer de su personaje. A lo mejor es que Pedraza tampoco tiene gracia ni picardía como actriz, ya lo veremos. Y aún encontramos menos atractivo en la pareja investigadora formada por Carlos Cuevas y Guiomar Puertas. Ambos trabajan de una manera plana y poco creíble.
Opinión final de la película El verano que vivimos
La película El verano que vivimos es un drama romántico del montón. Pretende alzarse como una gran historia de amor nunca explicada, pero realmente acaba cayendo en las mismas estructuras encorsetadas de los melodramas. Como guinda del pastel, sigue perpetuando una visión idealizada del amor romántico.
Ficha Técnica
Título original: El verano que vivimos
Género: Drama, Romántico
Sitio Oficial: Película El verano que vivimos
País: España
Idioma: Español
Fecha de estreno en España: 4 de diciembre de 2020
Productora: Mr. Fields and Friends, Atresmedia Cine, Warner Española S.A, Bambú Producciones, La Claqueta PC, 4 Cats Pictures
Distribuidora: Warner Bros Pictures España
Duración: 93 min.
Año:2020
Calificación por edades: No recomendada para menores de 12 años
Ficha Artística
Dirección: Carlos Sedes
Guión: Ramón Campos, Gema R. Neira, Salvador S. Molina, Javier Chacártegui, David Orea
Fotografía: Jacobo Martínez
Música: Federico Jusid
Reparto: Blanca Suárez,Javier Rey,Pablo Molinero,Carlos Cuevas,Guiomar Puerta,María Pedraza,Moreno Borja,Adelfa Calvo,Manuel Morón,Joaquín Núñez,Pedro Rudolphi,Paloma Reynaud