La plataforma digital Netflix añadió el pasado viernes a su catálogo lo último de Charlie Kaufman, ‘Estoy pensando en dejarlo’, basada en la novela publicada en 2016 de Ian Reid. El director, conocido por películas como ‘Eterno resplandor de una mente sin recuerdos’ o ‘El ladrón de orquídeas’ vuelve a sorprendernos con esta obra que no te dejará indiferente. Te dejamos con nuestra crítica de la película Estoy pensando en dejarlo de Netflix.
Sinopsis de Estoy pensando en dejarlo (2020)
Lucy (Jessie Buckley), también llamada durante la película como Louisa, Lucía o Ames, entre muchos otros nombres, es una chica joven que sale con un chico llamado Jake (Jesse Plemons) desde hace unas siete semanas. A los pocos minutos de película descubriremos que la joven se ha embarcado en un viaje en coche junto a su pareja para conocer a sus suegros, interpretados por Toni Collette y David Thewlis. Una idea que no le entusiasma demasiado.
Crítica de la película Estoy pensando en dejarlo de Netflix
La voz en off de Lucy servirá como guía durante los primeros veinte minutos de metraje. Con su monólogo interior averiguaremos que está pensando en dejarlo con su pareja, puesto que no ve ningún futuro. Todo parece normal. Una sencilla cena con los padres del novio; el primer contacto. Pero tratándose de Kaufman, ya puedes olvidarte.
Esta obra se nos presenta como un auténtico rompecabezas y nada más terminarla vas a ir en busca de respuestas. Son 134 minutos en los que el tiempo pasa a través de las personas, los perros se ven atrapados en un glitch como si de un videojuego se tratara, animaciones de cerdos moribundos y un baile en los pasillos del instituto. Vamos a calmarnos, todo tiene una explicación. Comenzamos con nuestra crítica de la película Estoy pensando en dejarlo (cuyo título original es I’m Thinking of Ending Things), la apuesta más arriesgada, sesuda e indie de Netflix.
Imágenes que son pensamientos
El primer acto, que es el viaje en coche de la pareja, está compuesto por una extensa conversación filosófica sobre cine, poesía y música. A priori, lo que puede parecer veinte minutos de relleno sirve para conocer a fondo a nuestros dos protagonistas. Diálogos cargados de referencias culturales como el poema Bonedog, de Eva H. D. o Oda: insinuaciones de inmortalidad en los recuerdos de la temprana infancia, de William Wordsworth.
Cuando ya has avanzado lo suficiente en el filme para darte cuenta de que esto va a ser un viaje de lo más movidito, puedes apreciar que el centro de la narrativa, muy compleja debo añadir, son los pensamientos. En concreto los de Jake. “A veces un pensamiento está más cerca de la verdad, de la realidad, que una acción. Se puede decir cualquier cosa, se puede hacer cualquier cosa, pero no se puede fingir un pensamiento” le cuenta Jake a Lucy, o sea cual sea su nombre.
La película Estoy pensando en dejarlo en sí es un recopilatorio de sus pensamientos, de cómo concibe el mundo y las cosas, cómo absorbe todo lo aprendido y deja en conserva en su mente, cómo es su mujer ideal y todo lo que podría haber sido.
La dirección de Charlie Kaufman
Charlie Kaufman agarra el volante y nos expone pensamientos de lo más macabros de forma exquisita. Consigue plasmar un guion de lo más complejo en imágenes de una forma que parece casi imposible pero que, evidentemente, él logra.
Como podemos deducir, este tipo de largometrajes están sometidos a un mismo riesgo: el esqueleto externo que envuelve a la película intimida de una forma que al espectador le da miedo adentrarse y puede llegar a perderse, sin poder disfrutar al completo de la experiencia y sin llegar a entender del todo lo que se nos está queriendo explicar. Kaufman asume ese riesgo en la película Estoy pensando en dejarlo y sale más que airoso, aún así, no la recomiendo a espectadores poco pacientes.
Opinión final de la película Estoy pensando en dejarlo de Netflix
En conclusión, la película Estoy pensando en dejarlo de Netflix es una experiencia (más que una película) que te dará más preguntas que respuestas. La complejidad del guion y de la puesta en escena encajan en perfecta armonía con el reparto; Jesse Plemons, nos muestra su lado más hipnótico y siniestro; Jessie Buckley, de lo más carismática, nos ofrece una interpretación sublime; y Toni Collette y David Thewlis, como siempre, brillantes, poniendo el broche de oro a un cuarteto al nivel de la dirección de Kaufman. Sin duda, uno de los grandes estrenos de este año.