La propuesta de la película es clara y sencilla, busca entretenernos y hacernos pasar un rato agradable y, en ese sentido, cumple con lo que promete. Men in Black International es una película de entretenimiento al uso, cuya única intención es que disfrutemos de la experiencia y saquemos una sonrisa en determinadas ocasiones.
PosiciónColaborador
Unido14 marzo, 2019
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Nací en 1994 y, desde bien pequeño, el cine y la literatura siempre ha sido el único medio de evasión en el que me he podido refugiar, una forma de escapar de la realidad y afrontar la misma desde otros puntos de vista. Posteriormente comencé a profundizar más en el mundo de las críticas de cine y en la capacidad de analizar las películas desde otras perspectivas ajenas al estricto gusto de las personas. Actualmente estudio Ciencias Políticas y Administración Pública en la Universidad Autónoma de Madrid, y me gustaría en un futuro dedicarme a algo relacionado con la escritura.
Dome Karukoski abandona la repetitiva y tediosa forma de narrar la vida de los escritores y nos deslumbra con una modélica narrativa que hace de la obra y del autor un solo ser. La fantasía comparte plano constantemente con la realidad, despegándonos de la idea preconcebida de que estamos ante una película basada en hechos reales, poniendo el foco en lo realmente importante, el cine.
En 2001, la joven Qiao está locamente enamorada de Bin, un cabecilla del hampa local. Testigo del ataque de una banda rival contra Bin, dispara para defenderle. Por no delatarle, Qiao acaba condenada a cinco años de cárcel. Una vez en libertad, Qiao busca a Bin pero este se niega a aceptarla de nuevo en su vida.
Miller con este documental pretende mostrarnos la horrible demonización que persiste a día de hoy sobre el cuerpo femenino y su sexualidad. Para ello da voz a diferentes mujeres de diferentes culturas o religiones, demostrando así que no es un tema social o cultural, sino estructural en todo el mundo. Un documental imprescindible para sensibilizarnos sobre las demoniacas prácticas que se llevan a cabo a día de hoy sobre el cuerpo de las mujeres y para ser conscientes de las desigualdades que sufren.
Louis Garrel nos plantea una película donde el humor y el drama van de la mano, actualizando las relaciones de pareja y alejándose por completo del amor romántico. Busca, sin lugar a dudas, plasmar una realidad donde el hombre no posee el control de las relaciones, viéndose abocado a aceptar la voluntad de su amada.
Zhang Yimou consigue con esta película retrotraernos a lo que logramos sentir alguna vez con su antigua obra: “La casa de las dagas voladoras”. Con un guion más pausado y una acción más medida logra adentrarnos en una intriga que nos atrapará desde el primer momento, sin recurrir a grandes momentos de acción para llamar la atención del espectador, pues la trama ya es lo suficientemente interesante para no quitar los ojos de la pantalla.









