Universal Pictures es la primera distribuidora que nos trae material nuevo tras estos meses de confinamientos con una película mostrando el lado más humano de la música. Hoy os dejamos nuestra crítica de la película Personal Assistant. ¡Ganas de ir al cine!
Sinopsis
Maggie (Dakota Johnson) es la asistente personal de Grace Davis (Tracee Ellis Ross), una cantante de éxito inmersa en la vida musical de Los Ángeles, con la que alternará su trabajo de asistente con el de productora para labrarse su propio futuro.
Crítica de la película Personal Assistant
La propuesta de la directora Nisha Ganatra resulta entretenida, agradable pero poco innovadora. En este sentido la película no trata de engañarnos (al menos no hasta el final) de que es una película sin pretensiones, formulaica y que no trata en ningún momento de descubrir la pólvora. Una película que hemos visto ya miles de veces y que lo sabe, por lo que trata de ser un mero entretenimiento palomitero con tintes muy melómanos, consiguiendo su objetivo.
No resulta sorprendente, pero sí disfrutable
Porque The High Note (título original del film) tiene en esto su hoja de doble filo. Por un lado, al no salirse de ciertos límites y manteniendo un ritmo adecuado, la película se disfruta y hace que uno desconecte y sencillamente se deje llevar. La propuesta es simple y el desarrollo el esperado, así que podemos buscarle todos los fallos que queramos pero no el de ser una película que engañe. Pero claro, el hecho de ser una película formulaica, nos lleva inherentemente a pensar (y tras visionarla, constatar) que desde el primer minuto sabemos cómo va a acabar. Personal Assistant (2020) va avanzando con todos los detonantes propios de este tipo de película, sorprendiendo poco o nada pero permitiendo que conectemos con la historia… hasta cierto punto.
Una mentira que pretende cambiarlo todo
Personalmente para quien esto escribe, el “truquito” de generar un conflicto, un midpoint que lo cambia todo en base a una mentira, es un recurso ya pasado de moda y que no le hace bien a casi ninguna película. Y esto le ocurre a la película Personal Assistant. En pos de tener ese midpoint en el que una “mentira piadosa” se descubre y genera ese altibajo, ese cambio en la trama, la película cae en el maniqueísmo de que, o hace esto o su trama no avanza, y lo cierto es que le hace chico favor a su historia, más que nada porque no termina de ser creíble ni verosímil.
Si bien es cierto, esta “mentira” tiene una pequeña justificación a posteriori, a modo de revelación, que es sin duda el punto más discutible de la película. Dicha revelación, es un intento por parte de la guionista Flora Gleeson (esta es su segunda película) de salir de esa neutralidad, de ese guion tan plano y poco sorprendente para llevarnos a un clímax más emotivo. Y aunque la decisión de esta “revelación” es un golpe bajo, una trampa demasiado evidente que rompe la honesta concepción de la película, he de decir que en mi caso, consiguió su objetivo de hacer el clímax más emotivo y despedirse buscando más la reacción emocional que la coherencia.
El mundo de la música desde otra perspectiva
Por último, mencionar en esta crítica de la película Personal Assistant que resulta acertado ver el lado menos malo del mundo de la música. Mientras que muchos biopics y otras películas centradas en este sector hacen del uso de las drogas y los excesos su contraste, en este film podemos ver el lado menos oscuro; un mundo competitivo y duro pero no necesariamente infernal y una historia de superación sin necesidad de que su protagonista tenga que cruzar la línea de la moralidad para conseguir su objetivo.
Y por supuesto, mención especial a todos los datos melómanos que se refieren en la película. Como cinéfilo, uno puede verse identificado con su protagonista a la hora de comentar en todo momento datos de bandas, compositores y músicos del siglo XX, y eso es de las pocas cosas que le da un toque llamativo al film. Esa pequeña discusión entre el Thunder Road y el Wrecking Ball de Springsteen, entre otras, me pareció magnífica. Easters Eggs para cualquier melómano.
Interpretación
Este tipo de películas, viniendo de producciones made in Hollywood, no se puede permitir no tener buenas interpretaciones. Tracee Ellis Ross representa muy bien a la estrella musical que vive por todo lo alto pero sin ser excesivamente prepotente, hecha a imagen y semejanza de una mezcla de Diana Ross y Aretha Franklin. Dakota Johnson sigue encerrada en el personaje tímido y agradable que le brindó ‘50 sombras de Grey’, pero no significa que su interpretación no sea convincente y creíble. El resto del elenco realiza muy bien su cometido, desde Kelvin Harrington Jr. hasta Bill Pullman pasando por Ice Cube, que sabe hacer muy bien de sí mismo.
Opinión final de la película Personal Assistant
Una película sin pretensiones, melómana y con un buen mensaje pero que no sorprende y no consigue engañarte cuando se lo propone. Aunque normalmente no trata de hacerlo.