El asesino de los Caprichos llega a los cines con un dúo protagonista de lo más prometedor formado por Maribel Verdú y Aura Garrido. Lástima que esta versión nacional de ‘Seven’ no termine de jugar bien sus cartas. Analizamos esta nueva propuesta nacional de cine negro, no te pierdas nuestra crítica de El asesino de los Caprichos.
Sinopsis
Dos inspectoras Carmen Cobos (Maribel Verdú) y Eva González (Aura Garrido) se podrán tras la pista de un nuevo, fetichista e inquietante asesino que parece obsesionado por imitar en las escenas de sus crímenes los Caprichos de Goya.
Crítica de El asesino de los Caprichos
La premisa de El asesino de los Caprichos es más que atrayente a priori, aunque no se pueda decir lo mismo en lo que respecta a su originalidad. Un asesino en serie que parece obsesionado con los Caprichos de Goya y se dedica a imitar en las escenas de sus crímenes a su pintor fetiche. Todas sus víctimas coinciden en una cosa, su buena posición social y su amor por el arte, siendo todos ellos asiduos a las subastas de arte.
Aura Garrido y Maribel Verdú, las protagonistas
No podemos dejar de destacar en esta crítica de El asesino de los Caprichos el punto fuerte de la cinta, la elección de sus dos protagonistas: Aura Garrido y Maribel Verdú. Dos de nuestras mejores actrices que vuelven a demostrar una vez más su gran potencial en este proyecto, el cual significa además un cambio total en el rol de personajes a los que nos tiene habituados la Verdú.
Y es que ambas actrices protagonizan dos personajes totalmente opuestos. Aura Garrido es la inspectora Eva González, una mujer joven pero sobradamente preparada, aunque precisamente esa juventud le llevará a tener que demostrar continuamente que ha llegado a ese puesto de responsabilidad por méritos propios. Amable, calmada, responsable, antepone su familia a su carrera profesional.
Maribel Verdú será la inspectoraCarmen Cobos, una mujer impulsiva, de mucho carácter, solitaria y fría en sus relaciones personales. Se implicará de manera casi obsesiva en el caso, y es que para ella el trabajo no tiene horarios.
Dos mujeres con caracteres totalmente enfrentados, pero condenadas a entenderse en lo laboral para resolver el caso que tienen entre manos.
Gerardo Herrero, director de El asesino de los Caprichos
Dirigida por Gerardo Herrero (La playa de los ahogados), cuenta con guión de Ángela Armero (Secretos de Estado). Destacar en esta crítica de El asesino de los Caprichos que su argumento, e incluso la representación de los crímenes, recordará punto por punto a la mítica Seven (1996) de David Fincher; y es que no son pocos los puntos que tienen en común: la pareja protagonista está formada por un veterano detective y por un jovenzuelo policía recién llegado a un nuevo destino, pese a sus enormes diferencias se verán obligados a entenderse para revolver el caso; el asesino en serie recrea escenas macabras y estudiadas al milímetro en cada una de las escenas del crimen, en Seven basados en los Pecados Capitales y en la que nos ocupa en los Caprichos de Goya.
Pese a las semejanzas más que evidentes con una de las obras maestras de Fincher-que ya restan algo tan valorado como la originalidad a un proyecto-, tan poco queda bien resuelta la trama que implica a los asesinatos. No tardaremos en conocer la identidad del asesino, algo de lo que se encargará el director y el actor en cuestión haciendo casi mímica auto culpable ante la cámara y remarcando en plano su figura. Así, en la primera media hora de película el espectador ya conocerá el secreto que se presupone mejor guardado de la cinta, lo que conllevará inevitablemente la pérdida de interés por la trama en el patio de butacas.
Opinión final de El asesino de los Caprichos
La película tiene un arranque prometedor y cuenta con dos actrices entregadas a la investigación que plantea la trama. La química entre Verdú y Garrido es bestial, y ese será el principal aliciente para acercarse a El asesino de los Caprichos.
Entrevista a Maribel Verdú y Aura Garrido
Trailer
