Crítica de la película Doctor Sueño, la película que dirigida por Mike Flanagan y protagoniza por Ewan McGregor supone la apuesta taquillera para el fin de semana de Halloween 2019.
Sinopsis
Danny Torrance (Ewan McGregor) es ahora un adulto que lucha contra su traumático pasado y trata de olvidar el “Resplandor” a golpe de botella. Tras una visita de su viejo amigo Dick Hallorann (Carl Lumby), comprende que debe cambiar de vida y solucionar sus problemas. Mientras lucha por mantenerse sobrio, Danny se comunica de manera accidental y mediante su don con Abra Stone (Kyliegh Curran), una niña muy especial que le ayuda a enfrentar finalmente su terrorífica infancia en el Hotel Overlook.
Crítica de la película Doctor Sueño
Doctor Sueñosupone la adaptación de la nonagésima primera novela de Stephen King, y secuela de su tercera novela, “El Resplandor” (1977). Comenzamos con esta crítica de la película Doctor Sueño.
Mike Flanagan se atreve una vez más a ponerse al mando de la dirección con Doctor Sueño, la novela de Stephen King que da continuación a la historia que se sucedía en “El resplandor”. Ya hace hace dos años que el director decidió trasladar a la pantalla otra de las novelas de Stephen King, El juego de Gerald, con un resultado más que decente. Repite ahora, arriesgándose a que su obra sea comparada con la de Kubrick, quién dejo el listo muy muy alto. Nada más y nada menos que 39 años separan ambas películas, pero nadie ha podido olvidar “El resplandor”.
Flanagan se esfuerza por hacer de esta adaptación algo personal, pero respetando palmo a palmo la reinterpretación de las escenas pertenecientes a la película de 1980. Quizá estos pequeños homenajes a la obra de Kubrick son una manera de calentar el corazón de los nostálgicos pero personalmente me resultó demasiado extraño ver a Wendy Torrance interpretada por alguien que no es Shelley Duval, aunque fuera tan solo un segundo.
Ha sido una pena también no poder ver de nuevo a Jack Nicholson como Danny Torrance porque aunque Henry Thomas hace una imitación bastante decente y físicamente muy creíble, esos papeles pertenecen con creces a los actores originales.
La banda sonora es desde el primer momento algo a destacar en “Doctor Sueño”. Logra integrarse perfectamente con la imagen, generando una tensión que consigue que el corazón del espectador lata al ritmo de la escena y creando una atmósfera propia de un mundo de pesadilla que pone los pelos de punta.
Un regalo a los nostálgicos
Sin duda lo que de verdad ha funcionado para emocionar a una fanática de “El resplandor” como yo, ha sido volver a visitar el ahora abandonado Hotel Overlook: Una larga secuencia en la que un Danny adulto se entretiene en encender las calderas, recorrer de nuevo el pasillo de moqueta geométrica, asomarse a la puerta del baño, pasar por delante de la habitación 237 e incluso hacer una parada en el fantasmagórico bar del hotel. Sin duda, resulta un auténtico regalo para la vista y los sentidos.
Una narración circular que concluye con el clásico fuego purificador que destruye el Overlook al igual que ocurría con la mansión de Manderley en “Rebecca” (Alfred Hitchock, 1940) o la cabañita de “Midsommar” (Ari Aster, 2019) y la redención del protagonista a través de su sacrificio pasando a ser un mentor etéreo y consiguiendo así cambiar el destino de convertirse en su propio padre.
La adaptación a manos de Akiva Goldsman
Sobre si la adaptación de Akiva Goldsman en el guion de la película hace justicia a la novela no puedo opinar, puesto que no he tenido tiempo de leerla, sin embargo la historia en pantalla tarda demasiado tiempo en arrancar teniendo en cuenta que ya conocemos al protagonista y su entorno. No hubiera venido mal añadir un poco de ritmo al principio.
Es una película entretenida, bien ambientada, con escenas que verdaderamente dan escalofríos pero que en ocasiones resulta demasiado descriptiva, perdiéndose en detalles que luego no son importantes para la trama. Esto ocurre por ejemplo con el sombrero de Rose La Chistera (Rebecca Ferguson) que parece ser algo muy importante que nadie puede tocar pero luego queda sin explicación.
Por otro lado, personajes con un gran potencial como Snakebite Andi (Emily Alyn Lind) parece que van a tener un peso mayor en la historia pero enseguida quedan relegados a un segundo plano. Se pierde demasiado tiempo en ver a Rose La Quistera y su banda alimentándose del vapor de la gente cuando hay cosas más interesantes que mostrar.
Lo mejor de la película, sin duda alguna, son esas aquellas escenas en las que tanto unos como otros se tienden trampas mentales en las que el espectador no sabe realmente dónde están o qué es real. La pericia para dar vida a algo tan abstracto como es la mente me resulta digna de admiración y creo que es lo más inquietante de la película.
Opinión final de la película Doctor Sueño
Siento que Stephen King tenía la necesidad de mostrarle al espectador que Danny creció y no se rindió. Fue capaz de plantarle cara a sus problemas y superar sus traumas, una idea que por otro lado, está muy presente en toda la obra del autor y en su vida personal, pero como espectador tengo la sensación de que Doctor Sueño no es una película que vaya a marcar un antes y un después.