El renacido o “The revenant” de Alejandro González Iñarritu, fue un rodaje duro para todo el mundo. Descubre algunas curiosidades.
The revenant: Al mal tiempo buena pasta
Debido a que se alargó la producción de El renacido, la nieve comenzó a derretirse antes de que acabara el rodaje en la localización de Canadá. Como se acercaba el verano no hubo otra que trasladar a todo el equipo al sur de Argentina, donde en esos momentos había las mismas condiciones de nieve que donde se encontraban. Ahí es donde se ve que el poder de una producción de 150 milloncejos de nada.
Leonardo lo da todo en “El renacido”
En una escena, nuestro querido Leonardo DiCapriotuvo que zamparse del tirón un buen trozo de hígado de bisonte crudo. Y el tío lo hizo sin trampa ni cartón a pesar de que es vegetariano. Según el mismo contó en una entrevista, estuvo viendo como su compañero Arthur RedCloud se pasó la mañana comiendo su parte en la escena. Luego los de FX le llevaron un trozo de gelatina roja. Al chico le pareció tan irreal que decidió zamparse el hígado real (como son los actores con tal de no ser menos). Eso sí, jamás de los jamases lo volverá hacer. Al menos eso dijo.
También tuvo que aprender a disparar un mosquete (esto no es ninguna proeza, lo dice el que redacta el artículo que también es especialista), hablar dos lenguas nativas americanas (Pawnee y Arikara) y estudiar con un doctor especializado en antiguas ciencias curativas. Según el nominado los premios Oscar 2016 por esta interpretación, este ha sido su actuación más difícil de toda su carrera. Según nuestra crítica Diana Mangas, como no le den el premio esta vez, el chaval se suicida. (Puede que haya cambiado las palabras de la directora un poco, pero es que esta peli es muy dramática).
Por cierto, Leo rechazó hacer de Steve Jobs por hacer esta película. ¿Se lo agradecería Michael Fassbender?
Nuestro querido protagonista también quiso agradecer el buen trabajo de todos los currantes del equipo pues, a pesar de que el personaje pasa por unas condiciones extremas de sufrimiento durante toda la película y las pasa canutas, nunca se hizo ni una heridita durante el rodaje. No como un especialista que yo me sé que recibió un tiro en la axila de parte de un… de un… ¿maestro de taichi? Sí. Esto es España. Donde el currículum y el amiguismo prima. Algún día desvelaré este tipo de curiosidades…
La luz natural y el fuego indómito de la película
Toda la película ha sido rodada con luz natural menos una secuencia, la del campamento en la que están con una fogata. Resulta que hacía tanto viento que no había manera de controlar el fuego para que diera la luz necesaria para rodar. Así que, como es cine, pusieron bombillas alrededor para proporcionar una luz tenue de fondo que les sirviera de base. “Pero esa es toda la luz artificial que hemos usado”, declaró el director de fotografía Emmanuel Lubezki.
Tom Hardy nunca lee guiones…
Pues sí señores, debe ser que tiene un buen agente que lo hace por él. En esta ocasión se encontraba dispuesto a ser el protagonista de Splinter Cell que se supone que llegará a los cines en 2017, pero Leonardo DiCaprio le pidió encarecidamente que se leyera el guión de “El renacido”. Al final Hardy aceptó y después de leerse medio guion -el tío vago- aceptó el papel.
Tom Hardy llega a las manos con el director Alejandro González Iñarritu
Nuestro querido Tom “Mad Max” Hardy estaba preocupado por algunas acciones de riesgo que tenía que hacer en esta película (que decepción, Max, que decepción), así que surgieron tiranteces entre él y el señor Iñarritu. Tanto es así que el director, a cambio de que hiciera las escenas, le dejó a Hardy que lo estrangulara un poco. Después esa curiosa imagen fue estampada en camisetas y Tom se las regaló a todos los miembros del equipo al final del rodaje.
La ira del del director de “El renacido”
Cuentan que el señor Iñarritu tiene bastante genio. Eso unido al ajustado calendario del rodaje y las difíciles condiciones de rodaje, hizo que el trabajo se volviera un lugar inhóspito para bastantes miembros del equipo. Algunos currantes abandonaron el barco y otros fueron despedidos por el director. Según Iñarritu: “Como director, si escucho un violín desafinado, tengo que sacarlo de la orquesta”. Parece ser que la mano firme contribuye a hacer buenos trabajos. A ver si toman nota en este país de ladrones y corruptos (y no sólo me refiero a la política, que el otro día vi como pedían una factura… ¡para un hueso de juguete de un perro! Y no. No se dedicaba a los animales.).
Más curiosidades: Alejandro también se negó a que nada fuera generado por ordenador para mejorar la película. Y ojito con su declaración: “Si acabamos rodando en una pantalla verde con café todo el mundo se lo pasará bien, estará contento pero estoy seguro de que la película será una de mierda”. Así que ya sabéis futuros cineastas. ¿Queréis una buena peli? Pues a pasarlo mal. No. Es coña. Conozco muchos rodajes chungos que acaban siendo productos chungos.
Y estas son por ahora todas las curiosidades que tenemos a bien contar en nuestra página. La crítica de la película la encontraréis de nuestra bella directora Diana Mangas, la cual estoy seguro considerará subirme el sueldo tras tan profundo y distendido reportaje.