François Ozoin nos presenta su última película con un juego de géneros tanto cinematográficos como sexuales. Una historia basada libremente en el relato "The new girlfriend" de Ruth Rendell , capaz de no dejar a nadie indiferente.
Roy Andersson culmina su trilogía sueca sobre el ser humano con esta curiosa comedia poco disfrutable para el gran público, que se llevó el León de Oro a la mejor película en el Festival de Venecia.
Intento de comedia, francesa, ridícula y vergonzante, que no resiste el menor embite o reflexión seria – audiovisualmente hablando -; y cuyo disfraz epatante, pretende, una vez más, dar gato por liebre; cuando no directamente arrancar por la fuerza la mueca aquiescente del espectador conmocionado ante tal sarta de lugares comunes, arquetipos sobre-explotados, y ritmo denso de duración interminable. Tan sólo apta para catalépticos, convalecientes de ictus cerebrales o público medio Francés.
Una maravilla. Una película imparcial contada por los protagonistas de una generación traicionada por los ideales del comunismo. Actores de primera revivirán y darán vida a sus personajes.
François Ozon nos presenta este drama ambientado inmediatamente después de la Primera Guerra Mundial.
Es verano y la cartelera da ganas de bostezar. Sin embargo llega a las pantallas esta pequeña joya, ganadora en Cannes 2013 al mejor guion, que debería abrir muchas conciencias.