Crítica de Space Jam (1996): Película de animación en HBO

De un largo nostálgico a un producto comercial

Crítica de Space Jam (1996), la única película que ha conseguido juntar a las dos superestrellas de mundos ajenos: Michael Jordan y Bugs Bunny. Una comedia familiar que combina la animación con acción real en un frenético partido de baloncesto para salvar a los Looney Tunes. Ya podéis disfrutar de la cinta en el catálogo de HBO con motivo de la celebración de sus 25 años y del estreno de una nueva y renovada entrega protagonizada por Lebron James bajo el título de Space Jam 2 Nuevas Leyendas.

Sinopsis

Michael Jordan, quien ha abandonado el baloncesto para dedicarse al béisbol profesional, se ve envuelto en un partido entre los Looney Tunes y los Nerdlucks. En dicho encuentro se decidirá si los capitaneados por Bugs Bunny serán secuestrados para trabajar en un parque de atracciones alienígena.

Para el desafío, los Nerdlucks roban las cualidades a las estrellas de la NBA Bird, Barkley, Ewing y los demás para convertirse en súper monstruos. Jordan y su equipo deben vencerlos para evitar ser secuestrados y devolver las cualidades a las estrellas de la NBA.

Michael Jordan y Bugs Bunny
Michael Jordan y Bugs Bunny

Crítica de la película Space Jam (1996)

El nacimiento de Space Jam: De un spot a un largo comercial

Space Jam (1996) es un film de los años noventa que nació a partir del spot Hare Jordan en 1992, donde Bugs Bunny y Michael Jordan escarmientan a unos jugadores de baloncesto. El anuncio se convirtió en el comercial más visto de ese año lo que supuso un éxito abrumador en cuanto a ventas. Warner seguía en su línea de renovar a los Looney Tunes y después de otro exitoso spot en 1995, el agente de Jordan tuvo la esperpéntica idea de convertir Hare Jordan en una película de animación.

Encontraron un punto en común con Warner; la productora quería aprovechar el boom de ventas y los agentes de Jordan querían potenciar su vuelta al baloncesto profesional.

Al fin Jordan aceptó un papel de Hollywood, a priori sencillo, ya que su personaje era simplemente ser él mismo, Michael Jordan. La propuesta de hacer una película cómica y familiar, daba pie a convertir a Jordan en una súper estrella apta para toda la familia.

Dirección: Joe Pytka contra un muro llamado Warner

Joe Pytka, el director de videos musicales y anuncios de renombre, fue el encargado de hacer la película Space Jam (1996). El director quiso hacer un largometraje más adulto, donde Jordan lidiara con problemas más maduros basados en su abandono del baloncesto y la motivación para dedicarse al béisbol profesional.

De todas formas, los productores de Warner solamente veían llover los dólares y como no entendían la dificultad del proceso de creación ni el de la animación, rechazaban cualquier idea creativa con tal de sacar el producto rápidamente. No solamente eso, sino que trabajar con chromas, en un estudio y con un actor que no es actor complica las cosas. El director argumentó que se cambió el script varias veces y se decidieron aspectos del guion sobre la marcha.

Aunque fue un éxito rotundo en taquilla (consiguiendo el top 12 de recaudaciones en 1996) el propio Pytka acabó reconociendo que la película Space James una hermosa película para los sábados” y no le falta razón. De todas formas, es de admirar que aun y haciéndole la zancadilla tras cada paso que intentó dar, consiguió una película divertida, entretenida, entrañable y familiar.

El guion: Un viaje del héroe lleno de relleno

Si por algo es conocido el cine es porque la mayoría de veces una buena idea no es sinónimo de una buena película. Juntar a Michael Jordan y a Bugs Bunny en un partido de baloncesto quizá sí era una buena idea, pero una película es más que eso.

El viaje de Jordan al mundo de los Looney Tunes, la transformación de los Nerdlucks, el entrenamiento, el partido, la doble apuesta y el desafío final constatan el arquetipo del viaje del héroe. Pero Bugs Bunny y el Pato Lucas yendo a por los pantalones y las deportivas de Michael, la ‘gran’ preocupación de los directivos de la NBA por un inminente virus, y la cantidad de escenas de las estrellas frustradas, suponen un gran desvío de la trama con un propósito demasiado obvio: llegar a la hora y media de metraje.

Y eso por no hablar de la aparición estelar de Bill Murray que llega al partido porque -y sí, cito textualmente sus palabras dentro de la película- “el productor es amigo mío”. No solo tiene una aparición descontextualizada (que se rodó a posteriori) y cogida por los pelos, sino que usa un metalenguaje que rompe con el universo de la película.

Por suerte no es la única vez, ya que los guionistas Leo Benvenuti, Steve Rudnick, Timothy Harris y Herschel Weingrod ya habían plantado este recurso cuando el Pato Lucas y Bugs Bunny critican a Disney o donde este último besa el logo de Warner Bros.

El partido de baloncesto de la película
El partido de baloncesto de la película

Personajes: De dioses supremos a caricaturas absurdas

En las escuelas de cine se enseña algo fundamental: la importancia del conflicto; y es que en la película Space Jam (1996) si de algo carece el protagonista es de conflicto. Michael Jordan nunca falla, menos en el béisbol que todos le alaban por ser quien es, no tiene evolución ni aprende nada por el camino. Es prácticamente la personificación de Dios desde el minuto uno hasta el ochenta y ocho.

No obstante, toda la perfección del personaje queda equilibrada con una interpretación que deja bastante que desear. Ya sea porque el personaje no cambia o porque Jordan no es actor (que bastante culpa tienen ambas) la expresividad es siempre la misma. Incluso en los momentos más tensos, no hay ni una pizca de preocupación en la cara de Jordan.

Del mismo modo, los Looney Tunes quedan exageradamente caricaturizados. Chuck Jones, guionista y animador de los Looney Tunes originales, opinó claramente en contra de la película argumentando que no se respeta la esencia de los personajes, hecho que ejemplifica esa caricaturización absurda en una ansiada búsqueda del gag barato. Asimismo, la relación entre Lola Bunny (personaje que se inventó para la película y que está exenta de trama más allá una desmedida sexualización para atrapar al público) y Bugs Bunny queda resumida en la búsqueda de un beso final, bastante efectista, que hace aplaudir a todo el mundo.

Un detalle positivo de los Looney Tunes es que los dotan de consciencia. Saben que son dibujos animados y saben que existen otras productoras de animación y eso provoca un sarcasmo y un humor que atrapa a un público más mayor.

Lo mejor: la animación y las imágenes reales

Cabe mencionar que las imágenes reales de Michael Jordan jugando para los Bulls impregnan la película de una atmósfera de baloncesto noventero nostálgico y motivador. Además, cada minuto que los animadores invirtieron en la película valió la pena; la animación, junto a la banda sonora, es el punto más fuerte. Como se altera la iluminación debido a la interacción de los personajes animados con el entorno real mientras la cámara les sigue es simplemente excepcional. Además, cabe resaltar que Jordan actuaba solo y si en las escenas que interactúa con otros humanos ya se cogen por los pelos, las que interactúa con un hombre vestido de verde son aún peores.

Opinión final de la película Space Jam (1996)

A modo de conclusión, la película de Space Jam (1996) es un producto de los años noventa hecho para vender, pero por lo menos lo hace de forma entretenida. Es nostálgica y marca una generación, pero definitivamente, no es buena. Es una película sin sentido, mal escrita y con bromas que han envejecido bastante mal; con muchas oportunidades perdidas, ya que se podrían haber tratado temas como el trabajo en equipo o la cultura del esfuerzo. Aun así, sabe muy bien a qué público se dirige y cumple con el objetivo marcado: que te lo pases bien y te rías un rato.

Si decidís revisionar la película de Space Jam (1996) antes de acudir al estreno de su secuela, Space Jam 2 Nuevas leyendas, os percatareis que no es tan buena como la recordabais. Aunque si queréis algo para desconectar un rato y, a modo de sugerencia, podéis poner su banda sonora a todo trapo; es aceptable.

Estreno y Ficha técnica

Título original: Space Jam
Género: Comedia, Familiar, Infantil
Sitio Oficial: Película Space Jam
País: Estados Unidos
Idioma: Inglés
Fecha de estreno en España: 15 de noviembre de 1996; 3 de febrero de 1997 (España)
Productora: Warner Bros. Family Entertainment, Northern Lights Entertainment
Distribuidora: Warner Bros Pictures
Duración: 88 min.
Año: 1996
Calificación por edades: Recomendada para todos los públicos

Ficha Artística

Dirección: Joe Pytka
Guion: Leo Benvenuti, Steve Rudnick, Timothy Harris y Herschel Weingrod
Música: James Newton Howard
Fotografía: Michael Chapman
Reparto: Michael Jordan, Brandon Hammond, Wayne Knight, Theresa Randle, Bill Murray, Larry Bird, Charles Barkley, Patrick Ewing, Shawn Bradlem, Larry Johnson, Muggsy Bogues, Thom Barry y Penny Bae Bridges

Cartel

Cartel de la película Space Jam (1996)
Cartel de la película Space Jam (1996)

Trailer

RESEÑA FINAL
La película Space Jam (1996) resulta nostálgica y divertida al traernos recuerdos de la infancia, y nos motiva a ver la segunda parte. Pese a todo ello no deja de ser un producto infantil que desde luego no ha envejecido demasiado bien.
DIRECCIÓN
5
GUION
2
INTERPRETACIÓN
3
LO BUENO
Para ser de los noventa, la animación encaja muy bien con la acción real.
Los Looney Tunes y Michael Jordan hacen un equipo divertido y entretenido de ver.
La banda sonora es muy buena.
LO MALO
Los personajes no tienen ningún arco de transformación.
El guion no tiene coherencia.
En la búsqueda del gag fácil se pierde un poco la esencia de los Looney Tunes.
3.3
Nota