Denis Villeneuve vuelve a deslumbrar con su dirección en ‘Sicario’ (2015), una historia sobre la lucha contra el narcotráfico visualmente brillante.
Sinopsis de la película ‘Sicario’ (2015)
Una joven agente del FBI es contratada por los equipos más preparados del gobierno estadounidense para luchar en la frontera de México contra el narcotráfico. Arropada por un enigmático hombre con oscuro pasado, la mujer se verá envuelta en una trama donde la ley queda en un segundo plano cuando el objetivo es ganar la guerra.
Crítica de la película ‘Sicario’ (2015)
Aunque la carrera de Denis Villeneuve es sobradamente dilatada, sus últimas dos películas, “Prisioneros” y “Enemy”, le colocaron en el mapa como uno de los directores más interesantes del panorama actual. Sicario (2015) mantiene sus características más reconocibles, asemejándose en crudeza al film protagonizado por Hugh Jackman. Villeneve vuelve a demostrar su maestría tras las cámaras. Su estilo reconocible vuelve a ser palpable viendo cómo se recrea en las escenas. Su narración es pausada pero no carente de interés. Cada secuencia atrapa al espectador en un ejercicio de suspense perfectamente medido, de miradas y de reacciones.
El cine del canadiense se define por las acciones de los personajes, el diálogo apoya pero no monopoliza. ‘Sicario’ (2015) es una película de momentos. Es disfrutada en su conjunto pero también se paladea en sus escenas por separado. Así, la secuencia inicial es un portento de la realización sin necesidad de hacer alardes de tipo videoclip. El espectador se siente dentro de la acción y en constante peligro con un sonido abrumador en los tiroteos, algo que se mantendrá durante todo el metraje y que supone una experiencia totalmente inmersiva. La larga secuencia en la que el equipo atraviesa la frontera supone uno de los mejores ejemplos de suspense de los últimos años. La sensación de peligro constante y de indefensión está totalmente conseguida, y el público mantendrá el alma en un puño, pendiente de un ataque inminente que se puede desatar en cualquier momento. Villeneve aquí hace un alarde planificación y puesta en escena difícilmente igualable.
El guion escrito por Taylor Sheridan presenta la historia sin ninguna clase de maniqueísmos. Los personajes son grises y tan solo la protagonista y su compañero del FBI parecen ser legales dentro de un sistema donde se evidencia que la lucha contra el narcotráfico es un guerra; tan cruel como las que se viven en Oriente Medio y donde no hay ni bueno ni malos, solo dos bandos que luchan por sus intereses sin pensar en las consecuencias. La trama principal se desarrolla de manera lenta pero segura, revelando poco a poco los enigmas que se plantean en los primeros compases, y manteniendo la intriga sobre el personaje de Alejandro hasta el último acto, donde tienen respuesta todos los interrogantes.
El reparto también aprueba con nota, dejando claro que Denis Villeneuve no solo es un artista con la imagen sino que también sabe sacar lo mejor de sus actores. Emily Blunt representa perfectamente su rol de agente desubicada en un entorno que no comprende y que no acepta. Josh Brolin convence con un papel que recuerda a interpretaciones pasadas y Benicio del Toro crea un personaje muy complejo e intimidante en una de sus mejores interpretaciones recientes.
Poco se puede decir del apartado técnico salvo lo evidente. El envoltorio es perfecto. La parte sonora es realista y abrumadora y la fotografía, de la mano del soberbio Roger Deakins, es una vez más perfecta, aunque menos espectacular que en ocasiones anteriores en pos de la realidad que intenta representar el film. Aun así su magistral uso del contraluz y sus tonos anaranjados hacen acto de presencia en más de una escena.
‘Sicario’ (2015) es una película directa, cruda y real. Denis Villeneuve vuelve a demostrar que es un gran director y que tiene mucho que ofrecer en el futuro. Su tratamiento de las situaciones y su violencia son reales, sin enmascaramientos. Ahora solo queda esperar un año antes de ver la siguiente obra del maestro canadiense; esta vez con la ciencia ficción como abanderada allanándole el camino para la secuela de “Blade Runner”.