El director Denis Villenueve y el guionista Aaron Guzikowski forman un inmejorable equipo para contarnos la historia más angustiosa, despiadada, dura, intrigante y desoladora de los últimos tiempos. En “Prisioneros” lo pasaremos muy pero que muy mal mientras los protagonistas Hugh Jackman y Jake Gyllenhaal tratan de localizar a las niñas desaparecidas. IMPRESCINDIBLE, claro.
Trailer de “Prisioneros”
Sinopsis de “Prisioneros”
Keller Dover (Hugh Jackman), es un dedicado padre de familia obsesionado con la protección de su prole. Ya sea una guerra nuclear o una inundación, el señor Dover está siempre preparado para cualquier imprevisto… o casi, pues en una fría tarde de otoño su hija pequeña Anna (Erin Gerasimovich) desaparecerá junto con su mejor amiga.
La policía desplegará rápidamente un plan de búsqueda de cuya investigación se encargará el infalible detective Loki (Jake Gyllenhaal), que hasta la fecha ha resuelto todos los casos que se le han asignado. La descripción de una desvencijada autocaravana que estaba aparcada cerca de la casa de los Dover, será única pista con la que contará el detective para intentar dar con el paradero de las dos menores.
La presión por parte del señor Dover, la urgencia por encontrar a las niñas y la investigación en un inesperado sórdido barrio familiar hará del caso un reto casi imposible de resolver.
Crítica de “Prisioneros”
A buen entendedor pocas palabras bastan. De leer la crítica de “Prisioneros“ al cine. Así, tan tajante como la película, pero mucho menos duro y cruel. “Prisioneros” es una bofetada al espectador.“Prisioneros” consigue evocar emociones despiadadas y, en cuestión de un par de escenas, logra sorprender al espectador con sentimientos encontrados. Crueldad, rabia y desesperación antagonizan con la humanidad de las personas en una historia sorprendente, no tanto por lo que cuenta, sino por cómo lo cuenta, quién lo cuenta y de qué manera lo cuenta. Señoras, señores, prepárense para más de dos horas de (maravilloso) sufrimiento:“Prisioneros” ha llegado a los cines.
Si me encontrara en una fiesta y estuvieran los miembros del equipo de “Prisioneros”, sería el típico tonto que va por ahí felicitando a todo el mundo. Típico, porque me imagino que a estas alturas ya han sido más que felicitados por personas relevantes en el mundo cinematográfico, y tonto… porque no sería la primera vez que hago ridículo aventurándome a congratular a algún artista mientras su halo de desprecio me abofeteaba con un “gracias” y su forzada sonrisa apuntillaba el “espero que se largue pronto”.
Pero sí, cuando un trabajo supera con creces a la media ya sea por su originalidad, por asumir riesgos, por entrar en delicados temas éticos y sobretodo, por tocar las emociones de alguien que la está visionando, creo que, aunque el autor pudiera ser un completo estúpido (que no digo que nadie lo sea, faltaría más) hay que hacérselo saber. Por otro lado, ninguno tenemos piedad a la hora de desollar a alguien que se haya equivocado en su obra (ejemplos miles, claro).
En“Prisioneros” todos suman. El impecable guión del apenas conocido Aaron Guzikowski y la bestial labor del director Denis Villenueve es una combinación espectacular. Juntos nos llevarán hasta la desesperada situación de dos familias amigas rotas de dolor tras la inesperada (siempre inesperada) desaparición de sus dos pequeñas hijas. Nos conducirán a través de sórdidas y crueles escenas, no tanto por la imagen (que en alguna ocasión, también), sino por la situación a la que se ven forzados sus principales protagonistas Hugh Jackman, que interpreta al padre de una de las niñas, y Jake Gyllenhaal, el detective que lleva el caso.
El reparto es infalible y las interpretaciones totales. Son unas interpretaciones tan detallistas que hacen que dudemos de donde está el actor y no sepamos hasta donde llega el personaje. En ningún momento apartaremos la vista de lo que transmiten y ni siquiera se nos ocurrirá dudar de la veracidad de sus palabras o comportamientos mientras que, los minutos avanzan en“Prisioneros” y las horas de desaparición por encontrar a las niñas aumentan, potenciando así la urgencia de cada uno de los personajes.
No me olvidaré de mencionar a Paul Dano y su interpretación de Alex Jones, el principal sospechoso de la desaparición de las niñas. Un joven veinteañero con la aparente capacidad intelectual de un niño de diez años. Sin apenas hacer nada, con un pequeño hilo de voz, es capaz de inspirarnos terror y compasión al mismo tiempo.
Y el reparto de“Prisioneros” suma y sigue con Melisa Leo (Oblivion, The Fighter) que interpreta a la madre del sospechoso, Viola Davis (Criadas y señoras) madre de la otra pequeña niña que es secuestrada, Maria Bello (Una historia de violencia, sin salida) la señora Dover, Terrence Howard (Iron Man y El Mayordomo que se estrena hoy) padre de la otra niña secuestrada…
Les recomiendo que se preparen para ver“Prisioneros” con mucho ánimo y que ni se les ocurra acercarse a la taquilla si tienen un mal día, están deprimidos o son muy sensibles… porque“Prisioneros” incomoda, remueve, duele y jod… mucho mientras que un apasionante thriller se desarrolla sin trampa ni cartón. Sin giros ni requiebros forzadamente inesperados y con una tensión, una urgencia cada vez más acuciante se apodera de “Prisioneros”.
Y por eso mismo, y por todo lo que no cuento“Prisioneros” es verdaderamente OBLIGADA.