Nueva propuesta de una película de terror para pasar un rato divertido con amigos viendo como unos cocodrilos con malas pulgas hacen pasar un mal rato a una nadadora y su padre, que quedan atrapados en su casa a causa de un huracán. Te lo desvelamos todo en la crítica de Infierno bajo el agua.
Crítica de Infierno bajo el agua
El verano es la época de las películas refrescantes, ya sea por su temática, por su ligereza o por su pretensión de entretener. La película de terror Infierno bajo el agua”recoge la tradición de las películas con monstruo acuático, en este caso cocodrilos, y lo hace con Alexandre Aja como director. Alguien no ajeno a este tipo de producto, pues es el responsable de la última versión de “Piraña”. Una película que para algunos se pasaba de lúdica, por lo que aquí el realizador rebaja su tono, sin perder algún que otro toque de humor, pero en este caso intenta imprimir un tono más serio y dramático a la propuesta.
Para ello se vale de un uso del suspense muy acertado y bien medido, que aguanta durante todo el metraje a pesar de desarrollarse casi en su totalidad en el interior de una casa. Afuera, el huracán que provoca la llegada de los cocodrilos, funciona como un catalizador excesivamente grande que se asemeja más a una película de catástrofes, haciendo casi una hibridación de géneros donde el terror físico juega un papel primordial en la generación de la atmósfera que hace interesante a una película que por lo demás no aporta nada al género. Esto no le rebaja la calidad a la propuesta, sino que esta se aborda sin complejos, centrándose en lo importante desde los primeros compases del guion.
El guión de la película de terror
El libreto siembra con inteligencia las situaciones que más tarde se desarrollarán. Sus líneas no se alejan del cine de género, con lo que eso implica, sin que signifique que se deje de lado el cuidado que merece cualquier producto audiovisual, más allá de las pretensiones con las que juegue.
La crítica de Infierno bajo el agua: El reparto
El reparto no pasa de correcto, y pocas caras conocidas ofrece, siendo solvente en todos los casos y reconociendo el esfuerzo físico que han tenido que desarrollar durante todos esos minutos frenéticos en los que el agua funciona más como antagonista que los propios cocodrilos, los cuales, como no podía ser de otra manera, pueblan la historia de jump scares que harán las delicias de los aficionados a este tipo de historias que nacieron con el “Tiburón” de Spielberg, sin que haya sido superada en ningún momento, ni de manera argumental ni, por supuesto, en lo que a realización se refiere y uso del suspense.
Conclusión final
Nuestra opinión de Infierno bajo el agua” es que es una película refrescante, entretenida y con más coherencia que los blockbusters con los que comparte cartel en este caluroso mes. Su ausencia de pretensión la hace honesta y confirma, una vez más, a Alexandre Aja como un valor seguro dentro del género, aunque este no sea su mejor trabajo.
