Aunque comparte título con la película de Takashi Shimizu de 2014, nada tienen que ver. Lo que ocurre en esta cinta parece tan real que podríamos pensar que está basada en un hecho verídico. 7500 es el código que anuncian los pilotos cuando su avión ha sido secuestrado y a partir de ahí, podemos temer el resto. Os dejamos con nuestra crítica de la película 7500 Avión secuestrado de Amazon Prime Video.
Sinopsis
Tobias Ellis (Joseph Gordon-Levitt) es el joven co-piloto de un avión Berlín-París secuestrado por un grupo de terroristas. Herido y a solas a los mandos, Tobias debe negociar con los secuestradores que intentar hacerse con el control del avión y amenazan con matar a todos los pasajeros.
Critica de la película 7500 Avión secuestrado de Amazon Prime
“Ojo por ojo y el mundo acabará ciego” con esta cita de Ghandi arranca el primer largometraje del director alemán Patrick Vollrath. Un film de bajo presupuesto y con apenas 90 minutos de duración que aporta un nuevo punto de vista al tema y sobre todo, mucho realismo.
Una premisa adrenalínica que engancha
Encerrado en cabina y con la prohibición de ceder y abrir la puerta, pocas son las opciones que tiene Tobias Ellis (Joseph Gordon-Levitt) para salvar a los pasajeros y tripulación del vuelo. Si abre la puerta todos morirán, pero si consigue negociar, puede que aún tenga alguna posibilidad.
Bajo esta premisa la cinta nos atrapa en cabina con el co-piloto, sin saber nada de lo que está ocurriendo fuera, más allá de lo que vemos a través de una pequeña pantalla que muestra el espacio de la tripulación. Ni siquiera podemos ver a los pasajeros, puesto que la cortina cubre el pasillo, sin embargo el ritmo al que la película avanza, la angustia y la brutalidad de la amenaza, hace que no podamos perder de vista los intentos del protagonista de evitar una catástrofe.
Primer largometraje de Patrick Vollrath
Quizá la cinta nos traiga recuerdos del 11-S u otras películas sobre secuestros y terrorismo basadas en hechos reales como por ejemplo “Capitán Phillips” (2013) con Tom Hanks, aunque esta última ocurriera en un barco. Incluso podríamos llegar a pensar que la película 7500 Avión secuestrado de Amazon Prime Video está basada en hechos reales; pero lo cierto es que Patrick Vollrath parte de una idea y acude sobre todo a la improvisación, dejando que sean los propios actores quienes construyan la escena.
De esta forma, y en grabaciones por periodos de 30 o 40 minutos, Vollrath consigue que los actores se metan realmente en la película y con ello otorgarle naturalidad y un realismo muy conseguido. Sin salir de la cabina, algo un tanto claustrofóbico teniendo en cuenta el tamaño de esta y el hecho de estar en un avión, la película 7500 Avión secuestrado consigue tenernos enganchados durante toda la cinta.
Joseph Gordon Levitt y Omid Memar son la película.
Desde el inicio de la película se siguen todos los protocolos que se utilizan en cada vuelo. Si resultan tan creíbles, es en parte porque el compañero de reparto de Joseph Gordon-Levitt, Carlo Kitzlinger fue realmente un piloto. A partir de ahí todo lo que ocurre forma parte de la improvisación.
Joseph Gordon-Levitt pasa de ser un piloto a un negociador, y debe tomar decisiones que requieren de una increíble “cabeza fría”. Ya nos tiene acostumbrados a excelentes interpretaciones a lo largo de su carrera, y con su papel como Tobias Ellis consigue convertirse en el alma de la película.
Cabe destacar también la actuación de Omid Memar en el papel de Vedat, uno de los terroristas con los que Tobias Ellis consigue conectar y que ayuda a sostener la parte final de la película.
Opinión final de la película 7500 Avión secuestrado
Destacar en esta crítica de la película 7500 Avión secuestrado de Amazon Prime Video, que Patrick Vollrath quería hacer una película realista y desde luego lo ha conseguido. Si bien el final se alarga demasiado, el resto de la película transcurre de una manera muy fluida, sin atascos.
Al principio, nos muestra cómo las cámaras de seguridad del aeropuerto siguen a un joven que podría resultar sospechoso; después todo transcurre con normalidad hasta que la cortina que separa a los pasajeros del espacio de la tripulación comienza a moverse y estalla el ataque. Con esa introducción y después aparente calma, Vollrath consigue crear un suspense y una tensión que sabe mantener durante el resto de la cinta.
Quizá el espectador eche en falta alguna escena de los pasajeros o incluso los gritos de pánico de éstos como sonido ambiental, pero lo cierto es que con lo que ocurre en cabina y en el pequeño espacio de las azafatas es más que suficiente. La angustia de los personajes protagonistas al estar atrapados (metafóricamente) de pies y manos, tanto del piloto como de uno de los terroristas, consigue traspasar la pantalla.