Matthew Vaughn, el director y guionista de la película Kick-Ass y productor de Lock & Stock y Snatch: “Cerdos y Diamantes”, ha confiado en un joven y hasta ahora desconocido Taron Egerton, para protagonizar la impresionante, divertida, salvaje y elegante “Kingsman: Servicio Secreto”. En esta entrevista, Taron Egerton nos cuenta su experiencia que le llevará al estrellato.
¿Cómo fue tu experiencia al leer el guion y cómo afrontaste el reto? ¿Qué pensaste al compartir reparto con grandes actores como Colin Firth?
Fue un enorme reto y una experiencia muy extrema, algo muy intenso. Cuando piensas que vas a trabajar con actores de la talla de Colin Firht, Michael Cane o Samuel L. Jackson impone bastante, impone mucho respeto pero también resulta muy emocionante.
Cuando leí el guión supe que se trataba de algo diferente. Que era algo único y fresco. Me llamó mucho la atención. Entonces todavía no había leído muchos guiones pero sentí que no era algo muy común. A lo mejor no suena muy modesto decirlo, pero cuando le leí pensé: “Tengo que hacerlo”. Tengo que hacerlo porque sentí como unas ansías, un hambre, una pasión de decir: “creo que lo puedo hacer y lo puedo hacer bien”. Me resultaba un reto creativo y aunque me sentía algo nervioso y tímido al afrontarme a la idea de tener que trabajar con estos actorazos tan brillantes, lo quería intentar. Sentía que lo podía hacer. Realmente te tienes que sentir de esta forma. Cuando yo he tenido esta sensación, que siento que es para mi, han solido darme el papel. Hay que sentirse así porque si no puede ser un desastre.
La experiencia ha sido maravillosa. Me gusta mucho el hecho de que mi personaje (Eggsy), aunque es un personaje joven, es el que conduce la acción y tiene un desarrollo, es un personaje redondo. No es una cara bonita y ya está. En grandes películas de estudio se ven personajes jóvenes que no tienen ningún trasfondo más allá de la fachada mientras que toda la acción transcurre a su alrededor. Me gusta ver que aquí hay algo más, que hay una evolución.
La película toca el tema de la clase social. ¿Como afrontaste esto para la preparación de tu personaje?
No veo un comentario social en la película porque sino no sería creíble. Si tan sólo se tratase de un tema social no tendríamos espías que saltaran 5 metros porque nadie se lo creería.
En cuanto a cómo planteé el personaje: Llevo cinco años viviendo en Londres y se ven muchos chicos como “Eggsy”, ¿sabes? Es como una especie de subcultura de jóvenes, chicos y chicas, que viven en las zonas más empobrecidas de la ciudad que tienen una forma muy particular de vestirse, de andar, de hablar, de comportarse… igual que aquí, en España. No es lo mismo un chaval que vive en un pueblo, su forma de andar, de hablar, de interactuar con sus colegas que uno que vive en la gran ciudad. O al menos ellos creen que es diferente. Lo que hice para documentarme fue sobre todo conseguir mucho material, dramas, películas, series de televisión, música… en el que aparecen jóvenes como estos, como “Eggsy”. Y al final, de tanto ver cómo hablan, cómo se mueven, cómo visten, al final estaba hablando dando vueltas por mi salón y hablaba, caminaba y me comportaba como un chaval así. Luego cuando llegas al set te sale sin pensar. Tiene que ser algo natural, que te salga sin pensar. Una vez llegas al rodaje tienes que estar listo para tu papel y centrarte en lo que tienes que hacer, tiene que ser fluido.
¿Qué pensaste cuando te dijeron que tenías un prueba con el director Matthew Vaughn, cómo te preparaste, cómo te fue y cómo le convenciste de que tú tenías que ser “Eggsy”?
Matthew Vaughn hace lo que quiere cuando quiere. Él es así. Sólo tuve doce horas para preparar el casting porque estaba haciendo una serie de televisión en ese momento. Me dio tres secuencias… Bueno, el ayudante, del ayudante, del ayudante, le dio tres secuencias a mi representante. No me las sabía muy bien porque casi no tenía para aprendérmelas. Al final sólo preparé dos. Estaba un poco nervioso porque como mucha gente soy un gran admirador de Matthew porque sus películas, su cine, es brillante. Tuve que leer un poco algunas secuencias en las que intervienen Harry y Eggsy. Había una por ejemplo que era en la que se me ve hablando en el pub. La segunda creo que era la del tren y la tercera, no me acuerdo muy bien porque no me dio tiempo a aprendérmela… creo que era la escena del apocalipsis en la que van con las gafas y todo eso.
La noche anterior lo que hice fue pasarlas un poco con mi compañero de piso, que me ayudó. Me sentí un poco tranquilo por ese lado porque me dio tiempo a trabajar algo las secuencias y luego lo intenté hacer lo mejor posible. En ese momento yo estaba interpretando un personaje Londinense. También era un chico de estas zonas, de esos barrios y tomé prestados algunos elementos de ese chico y me sentí muy seguro con el acento que puse en la prueba. En el casting era un dialecto mucho más tradicional, más clásico, como el de Michael Caine, que al final no se usó para la película.
Si te soy sincero no sé como le convencí. Yo llegué con mucha seguridad a la prueba, con mis nervios… y él me dijo que le había gustado la prueba… Bueno, no lo dijo de ese modo porque el nunca dice así las cosas. En ese momento que me había fichado ni nada. Me dijo: “Bien. Bueno. No está mal.” ¿Sábes? Como es él. Porque él tampoco te da una respuesta muy directa, él es así. Luego hice unas cuatro pruebas más. Querían que hiciese el casting con Colin pero al final, como él estaba haciendo la película de Woody Allen “Magia a la luz de la luna”, no pudimos coincidir. Luego estuve en casa de Mathew haciendo algunas escenas de acción… y finalmente me llamó y me dijo: “A lo mejor te doy el papel… Tendrías que hacer esto, esto, y esto.” y yo fue como: “¡Cómo que a lo mejor! ¡Háblame claro!”. Y un par de días después me dijo que sí, que me había dado el papel. No estoy seguro, pero me da la sensación de que tuvo que pelearlo. Que tuvo que luchar por mí porque, aunque él financiaba la película también hay otros productores y bueno… todo el mundo sabe que un nombre conocido es igual a recuperar tu dinero pero Taron Egerton es igual a ¿Quién coño es este tío? Así que yo le estoy enormemente agradecido y lo estaré toda la vida porque creyó en mí.
James Bond es la saga más conocida sobre agentes secretos. ¿Te han hecho comparaciones? ¿Te gustaría seguir en esa linea?
Sí, me encantaría hacer cosas de estas, películas de espías y agentes secretos pero también me gustaría hacer cosas diferentes como todo. Nunca pensé que fuera a hacer acción, no sé como me ficharon a mí. Me gustó pero no quiero encasillarme. Quiero sorprender a la gente con otras cosas al igual que Colin ha sorprendido haciendo esto, nadie se lo esperaba. Me gusta mucho el drama, la comedia, el teatro, la televisión, me encanta cantar… podría probar en un musical. No sólo quiero trabajar en el cine. Bueno, puedo seguir haciendo películas de cine pero mejor sería mezclarlo todo un poco porque si no me voy a aburrir.