Sarah Snook y Finn Scicluna-O'Prey en un fotograma de Winchester

Winchester: La casa que construyeron los espíritus | Opinión

Fallida y muy poco elaborada película. A rebufo de éxitos recientes como The Conjuring & The Conjuring 2 (2013, 2016) y que trata de aprovechar el revival de “casas encantadas” que ha devuelto cierto prestigio perdido al género. Winchester ha llegado para romper con la tónica alcista, que diría un economista de los que tan de moda están (también) últimamente.

Sinopsis de la película: Winchester

La cinta cuenta la verdadera historia de cómo Sarah Winchester (Hellen Mirren) heredera del imperio de rifles Winchester, perdió el juicio por completo (o no) y construyó más de un centenar de habitaciones en su mansión; así como recovecos laberínticos y escaleras con dirección a ninguna parte, cuya intención era la de despistar y confundir a los espíritus de los fallecidos a causa de las susodichas armas, y que llegaban en peregrinación a la casa para atemorizar a la matriarca y a su familia.

Jason Clarke y Helen Mirren – Opinión de Winchester

Crítica de la película: Winchester

Tan despistados y confundidos deben encontrarse los fantasmas en esa casa, como un servidor preguntándose durante la hora y media que dura la película, cómo dos actores de la talla de Hellen Mirren (The Queen, Gosford Park) o Jason Clarke (Lawless, Everest) pudieron dar el si, ante un libreto tan insulso y superficial.

Es precisamente el personaje de Jason clarke (Dr. Eric Price) el que sirve de vehículo conductor a los directores, los hermanos Spierig (Predestination, Saw VIII) para sumergirnos en el interior de la historia.

El doctor Eric Price es un reputado psiquiatra de San Francisco y un empirista obseso, al cual se le encarga, por parte de la junta directiva de la empresa de armas, un análisis exhaustivo de las facultades cognitivas de la señora Winchester, que a la postre está al mando de la empresa. El doctor Eric Price, por otro lado, vive inmerso en una concupiscencia fatua, donde las prostitutas y las drogas están a la orden del día. Un hecho traumático de su pasado, que se nos irá desengranando con reiteración plomiza hasta el final, tienen la culpa de su actitud volátil.

Muy en la línea el personaje, del doctor Thackery (Clive Owen) en la visceral y caustica serie The Knick (Steven Soderberg). Aunque al no disponer de ese sentimiento trágico a flor de piel y los matices contradictorios y poliédricos del personaje de Owen, acaba perdiendo por goleada y convirtiéndose en un mero cliché.

El desarrollo de la historia es lineal y mientras Jason Clarke trata de mejorar su cara de asombro a cada secuencia, el público ha de hacer un acto de fe para mantenerse en vilo.

Jason Clarke es el Dr. Eric Price – Opinión de Winchester

Los elementos de los que se sirven los hermanos Spierig para rellenar los cien minutos de metraje parecen un cajón de sastre: Hay un niño que ve cosas y una madre muy angustiada por su seguridad al estilo de El Orfanato (J. A. Bayona); hay un par de subtramas paralelas que nos serán contadas a través de flasbacks claves y cuya función última es tratar de sacarnos del tedio; está el mismo tipo de susto durante toda la cinta, que con una cadencia de 7 u 8 minutos, se va reproduciendo y que me recuerda a la manida frase de: La historia primero se produce como tragedia y después como farsa. Y finalmente un clímax cuya pretensión catastrófico-orgiástica (por la fecha en la que está ambientada la película aconteció el famoso terremoto de San Francisco) acaba provocando sonrojo.

El diseño de producción, al igual que resto de la cinta, es un fiasco: La dirección de arte, es más propia de la atracción de la casa del terror de un parque temático, que de un film comercial con cierta enjundia; la fotografía de Ben Nott cumple con diligencia y sin alardes el marrón de jugar entre las dos aguas: Cine de época y cine de terror.

Ya en los títulos del crédito, salimos de la sala, con la certeza de que dos excepcionales actores y una genial premisa, no te aseguran un buen resultado. Y mucho menos sin el tratamiento adecuado y el tiempo de cocción pertinente.

Estreno en cines: 9 de Marzo de 2018
DIRECCIÓN
5
GUIÓN
2
INTERPRETACIÓN
5
LO BUENO
La historia real en la que está basada la película.
La fotografía: efectista pero efectiva.
LO MALO
Un guión pobre: muy poco elaborado.
Dos grandes actores como Hellen Mirren y Jason Clarke completamente desaprovechados.
La dirección de Arte, en ciertas secuencias, parece amateur.
4