Bajo la batuta del prolífico director de videoclips y documentales del mundo de la música Jonas Åkerlund, Netflix adapta Polar – Surgido Del Frío, el aclamado cómic del español Víctor Santos.
Sinopsis
Duncan Vizla, el asesino más letal del mundo, conocido como Black Káiser (Mads Mikkelsen), está a punto de jubilarse. Pero su antiguo jefe le ha puesto precio a su cabeza. Y, en contra de su voluntad, tiene que plantarle cara a un grupo de sicarios más jóvenes, rápidos y despiadados, dispuestos a todo para eliminarlo.
Crítica de Polar
Polar es un film que no especula en cuanto a su carácter estético y devaneos argumentales. Ya desde su secuencia de inicio, donde se nos presenta a la pléyade de asesinos que, sabemos, acabarán enfrentándose a nuestro protagonista de un modo u otro, los espectadores somos partícipes de la declaración de intenciones del film: no es esta una película cuya imaginería visual apele a la sutileza, precisamente. El montaje acelerado, el discutible uso del erotismo, así como la representación desprejuiciada y plagada de humor negro de la violencia, hace que nos olvidemos enseguida de la sofisticación estilística de recientes versiones de old badass como John Wick, o The Equalizer. Es por ello que el aroma que desprende Polar se asemeja mucho más al de films de los años 90 como Abierto Hasta El Amanecer (1996), Amor A Quemarropa (1993) o Desperado (1995).
El reparto de Polar de Netflix
Mads Mikkelsen interpreta al protagonista absoluto del film, el veterano asesino a sueldo Duncan Viszla aka Black Káiser. El actor danés, pese a lo complicado que el film se lo pone en ocasiones, logra dotar a su personaje de la dosis precisa de frialdad calculadora sin caer en un hieratismo artificioso. Al mismo tiempo, logra con su interpretación apuntalar el desempeño de un implacable asesino, quizá el mejor, al mismo tiempo que se le presupone un cierto sentido de lo que es correcto.
Como coprotagonista del film tenemos a Vanessa Hudgens, quien encarna con solvencia a una joven solitaria que cruzará sus pasos con Viszla, en un papel con algo más de enjundia del que puede parecer en un inicio. Por lo demás, en cuanto al reparto, llama la atención la aparición de Richard Dreyfuss, así como también Jhonny Knoxville, cuyo característico desfase interpretativo aquí, por lo menos, se halla justificado.
Sobre el guión
Respecto al guion, resulta cuanto menos curioso que el punto de arranque del arco narrativo principal, se desprenda de las argucias de una organización criminal cuya supervivencia económica dependa del montante de beneficios que corresponde a los sicarios veteranos que, al cumplir los 50, se encuentren a punto de abandonar el servicio. Que, si optamos por tomarlo como una metáfora de la irrupción descontrolada y auspiciada, además, por las propias empresas, de fuerza de trabajo millenial en detrimento del trabajador experimentado, es probable que no erremos mucho el tiro.
Dicho esto, se hubiera agradecido nivelar el esfuerzo depositado en el exceso visual que permea la final de principio a fin, con el objetivo de nutrir algo más la parcela narrativa del film; el hecho de que se trate de la adaptación de un cómic, no es óbice para que la película no sea más cuidadosa con el modo de plantear determinados aspectos.
Opinión final de Polar
En resumen, un film entretenido y que goza de buen ritmo, donde da la sensación de que hay mucho esfuerzo en señalar el exceso visual del film, en detrimento del equilibrio argumental y la estabilidad narrativa, especialmente en su tercio final.