La decepcionante adaptación cinematográfica de la exitosa novela del escritor Albert Sánchez Piñol llega a la cartelera bajo el título de “La piel fría”. Su director Xavier Gens no ha sabido arriesgar y mostrarnos la crudeza que plantea su historia mediante metáforas.
“La piel fría”: Crítica de la película
El título de esta película, “La piel fría“, ya indica perfectamente lo que podremos esperar de este estreno… frialdad máxima. Es la típica película donde existe la curiosa proporcionalidad: cuanto más pasen los minutos de metraje menos nos importará el destino final que encuentren sus protagonistas. Una cinta lenta, sin apenas diálogos, donde la mayor curiosidad será vivir la extraña visita que recibirán los dos únicos habitantes de la isla noche tras noche; eso sí, una vez que han recibido un par de veces dicha visita en forma de asedio indiscriminado poco nos importará ya la infinita secuela de ocasiones más en las que se vuelve a dar dicho acontecimiento.
La película nos sitúa en una isla perdida en medio del océano. Allí dos hombres, los únicos habitantes de la isla y encargados de controlar el faro y de estudiar la climatología, serán asediados noche tras noche por unas extrañas criaturas que parecen salir del mar. Ante tal situación nuestros dos protagonistas, el joven (David Oakes) y el veterano (Ray Stevenson), deberán trazar un plan para sobrevivir una noche más. Para ello tendrán una aliada femenina que pertenece al otro bando, una de esas extrañas criaturas marinas llamada Aneris (Aura Garrido) que parece totalmente domesticada hacia los caprichos y placeres del más veterano.
Xavier Gens dirige una impersonal adaptación cinematográfica de la homónima novela de Albert Sánchez Piñol. Una cinta que con un arranque interesante pero que se quedará atascada en su núcleo central, intentando explicar lo inexplicable, y que terminará por aburrir al alargar la película innecesariamente con multitud de asedios noche tras noches por esas extrañas criaturas marinas. Una película que podría haber dado mucho de sí al tratar temas tan interesantes como la fornicación entre especies, los resultados de dicho acto, la violencia y la opresión hacia otras razas o simplemente hacia el que no es igual que tú, ejerciendo siempre la supremacía del hombre blanco; pero que lamentablemente se quedará en una película convencional de escenas de asaltos vista desde el prisma de una película fantástica de serie B. Está claro que se podía haber arriesgado más en el campo visual en lo que afecta a todo lo mencionado antes, eso sí, entonces la cinta no habría sido tan políticamente correcta. Así los temas principales que se respiran en el trasfondo de la trama se dejan sugerir, pero no se exponen con claridad y arrojo.
Lo mejor de la película de “La piel fría” será la magnífica interpretación corporal de una irreconocible Aura Garrido, que con su mirada y movimientos será capaz de transmitirnos el miedo, la ira y el deseo de su enigmático y acuático personaje. Además hay que destacar la fotografía de Daniel Aranyo, creando una atmósfera de cuento gótico, e inspirada en el pintor Caspar David Friedrich «El caminante sobre el mar de nubes». Y no me puedo olvidar del maravilloso trabajo que han hecho los encargados de realizar el trailer, en este caso mandará a más de uno y de dos al cine, aunque luego salgan previsiblemente decepcionados.