El director Hernán Zin durante el rodaje
El director Hernán Zin durante el rodaje

Lucha de gigantes: Crítica de la película documental

El desgarrador, poético, y cosmológico himno que Antonio Vega compusiera en 1987, en torno a la adicción en general, y a la heroína en concreto, sirve como vehículo conductor para este proselitista documental producido por la ONG Acción contra el hambre. Pero el proyecto de Acción contra el hambre es mucho más ambicioso, y no sólo se limita a producir el documental que aquí nos concierne; publicará a un disco de versiones del repertorio del ex-nacha pop, en primicia, a través de EL País el 28 de octubre, y llegará las tiendas de toda España el 14 de Noviembre.

Opinión

Numerosas personalidades se han involucrado en este proyecto (Alejandro Sanz, Iván Ferreiro, Rozalen, Ara Malikian, el propio Emilio Aragón, etc) con el fin de concienciar. Y concienciar a quién, se estarán preguntando, pues a quién va a ser, a usted y a mi de nuestra cuota de responsabilidad en las grotescas y bochornosas cifras de seres humanos con desnutrición en el mundo: 821 millones.

Imagen de la película documental “Lucha de Gigantes”

Lucha de gigantes, en palabras de sus promotores “pretende poner voz y rostro a los gigantes que, en todos los lugares del mundo, luchan contra el hambre. Los gigantes (…) se han servido de teléfonos móviles para contarnos, sin intermediarios ni filtros, su lucha (…) un viaje al corazón de nuestra incoherencia y frustración” Se entiende que los gigantes son los hambrientos.

Lucha de gigantes, salvo por su duración, 78 minutos; salvo por ver a Angels Barceló, reflexionando en voz alta mientras pasea con el carrito de la compra en un super de barrio; y coteja latas de atún de diferentes marcas, en nada se diferencia de un spot de una ONG cualquiera que podamos ver por televisión. Más allá de poner sobre la palestra, claro, el descomunal e incomodo problema del hambre y dar voz a los desheredados, nada nuevo aporta este proyecto. Quizá la única nota positiva sea la audacia de su director, Hernán Zín (La guerra contra las mujeres; Nacido en siria), de retratar en primera persona, y con 25 móviles, la miseria y desesperación de las familias. Pantalla vertical incluida.

DIRECCIÓN
6
GUIÓN
3
MONTAJE
4
LO BUENO
La ausencia de complejos por parte del director a la hora de dar rienda suelta a sus “instintos” audiovisuales.
LO MALO
La ausencia de proyecto; el proselitismo enmascarado cuyo único fin es el de captar socios. Se le podría haber sacado mucho más jugo de no ser porque en el fondo parece ser una gran campaña de publicidad.
4.3