“La Teoría del Todo” (The Theory of Everything) llega a nuestras pantallas para cautivarnos con la biografía del astrofísico Stephen Hawking. Un largometraje que nos acerca a la vida de uno de los científicos más importantes de nuestro tiempo de la mano del director James Marsh.
Sinopsis de “La Teoría del Todo”
El relato se abre mostrándonos a Hawking (Eddie Redmayne) en su etapa como estudiante de doctorado mediante unas pinceladas que retratan su figura como intelectual a través de acontecimientos que reflejan su naturaleza genial. Una etapa muy importante para Stephen, pues no sólo será el período en que determinará su futuro como investigador, sino también el momento en que conocerá a Jane (Felicity Jones), una estudiante de poesía con la que establecerá una relación sentimental. Pero la aparición de una enfermedad degenerativa convertirá la vida de Stephen y Jane en un duro camino hacia la normalidad, plagado de momentos que pondrán a prueba su convivencia.
Crítica de “La Teoría del Todo”
“La teoría del todo” no es uno de esos dramas que te exponen a una avalancha de crudeza infinita al suprimir cualquier signo de positivismo, provocando la incomodidad de algún que otro espectador despistado que creía haber ido a ver un filme menos agresivo. Se trata, precisamente, de todo lo contrario: un drama para todos los públicos, que mezcla los momentos más fríos con un pequeños toques de humor que contrastan sutilmente con el carácter del filme (eliminando la posibilidad de un dramatismo total), por tal de abrirse a un público más amplio.
De modo que, bien podemos considerar que el nuevo filme de James Marsh es lo que conocemos cómo un drama estándar, es decir, sin mayor propósito que el de proyectar la vida de un personaje determinado, a través de las experiencias que mejor ilustran la imagen que éste ha dado de sí mismo.
Lo interesante de todo esto es que Marsh ha producido un largometraje que se inserta dentro del drama a pesar de que tiene mucho de su obra más habitual, el documental, pues“La Teoría del Todo” está basada en la novela ‘Travelling to Infinity: My Life with Stephen’, que la propia Jane Hawking escribió acerca de la vida junto a su marido Stephen. De esta forma, Marsh lleva a cabo una combinación entre su capacidad documental y la información que Jane le brinda en su libro, creando así una mezcla entre el retrato(que nace de la base biográfica del relato) y la obra dramática (fruto de la subjetividad del texto de Jane). En definitiva, un camino más prometedor a la hora de salirse del documental para el director inglés, pues no cosechó demasiado éxito la última vez que lo hizo (Shadow Dancer, 2012).
Lo que sí cabe destacar de “La Teoría del Todo” es la interpretación de Hawking que lleva a cabo Eddie Redmayne, pues debemos tener en cuenta la dificultad de interpretar a un personaje con una enfermedad degenerativa, cuya manifestación recae en su físico (sobre todo en su expresión facial). Un aspecto que la crítica ha tenido muy en cuenta a la hora de otorgarle, recientemente, un Globo de Oro al mejor actor, así como a la banda sonora, que encaja perfectamente en la historia que nos brinda el filme y que enfatiza su naturaleza dramática a lo largo de cada escena.
