Jason Reitman se decanta esta vez por una historia coral que nos advierte de los peligros de internet y hacia dónde nos están llevando las nuevas tecnologías en “Hombres, mujeres y niños”.
Sinopsis de la película “Hombres, mujeres y niños”
Varios adolescentes pertenecientes al mismo instituto viven sus relaciones sociales de distintas maneras a través de Internet. La evolución de la Red de redes parece no ser adecuada para estos jóvenes, que sufren las consecuencias de sus actos virtuales. Sus padres tampoco son ajenos a las herramientas digitales, y sus efectos también quedan patentes en ellos.
Crítica de la película “Hombres, mujeres y niños”
Poco queda ya de aquel director ágil y con guiones interesantes capaz de crear cintas muy disfrutables, rodadas con pulso y sin dejar de lado una tesis interesante que hacía reflexionar al espectador cuando se encendían las luces de la sala. Este nuevo Jason Reitman, también guionista en esta ocasión, se afana en mostrar una serie de peligros que aunque reales y patentes en nuestra sociedad actual, aquí son presentados con un posicionamiento tal, que lo más probable es que sea percibido como un ataque directo a la ignorancia del espectador, sobre todo en el caso de los adolescentes. Y es que los púberes son el elemento central de la acción en esta “Hombres, mujeres y niños“, lo que convierte a sus coetáneos en público potencial, dejando las relaciones más adultas en un segundo plano, siendo estas mucho menos interesantes.
El guion de “Hombres, mujeres y niños”, intenta sacar partido a las numerosas tramas planteadas, propias de un relato coral como es el caso. Como suele ser habitual en este tipo de libretos, el equilibrio no resulta natural, quedando alguna de las historias un poco coja respecto al resto. Este hecho motiva que la duración de la película se resienta, provocando que se mire el reloj en más de una ocasión. Tampoco funcionan las conexiones entre los distintos personajes pertenecientes a tramas ajenas. Otro de los errores comunes en los relatos aparentemente inconexos y que aquí también se cumple, es la excesivamente explicativa voz en off que molesta y distrae, aunque oír a Emma Thompson siempre sea de agradecer.
Los problemas de guion en esta “Hombres, mujeres y niños” provocan que el reparto sufra las consecuencias. De esta manera J. K. Simmons –de lejos el más interesante de todo el plantel- se queda totalmente desaprovechado con escasos minutos en pantalla. Por su parte Jennifer Garner tiene que soportar sobre sus hombros un odioso personaje en el que no encaja y que podría haber sido para una actriz un poco más solvente, que dotase de menos comicidad involuntaria a la autoritaria madre. Lo que si se agradece es ver al casi siempre insoportable Adam Sandler desarrollando un rol dramático, en el que sorprende por su cambio de registro habitual. Los más jóvenes cumplen perfectamente y compensa que no se haya optado por rostros muy conocidos.