La película Noche de Juegos es hilarante, fresca, disparatada y completamente desinhibida. Una de las comedias de la temporada, capaz de seducir a toda clase de público. El guión de la película, en su constante y desesperada búsqueda de la comedia, acaba resultando una sucesión de volantazos a 180 en medio de la autopista. Lo que a priori podría terminar ocasionando un grave accidente, acaba resultando un éxito sin paliativos que ahora llega a Netflix. Excelente casting: Jason Bateman y Rachel Macadams exhalan química. Aquí arrancamos nuestra opinión de la película Noche de juegos de Netflix.
Max y Annie (Jason Bateman y Rachel Macadams) son una pareja de mediana edad que acostumbra a celebrar noches de juegos de diversa índole en compañía de sus amigos. La irrupción de Brooks (Kyle Chandler) el extravagante hermano de Max, supondrá una prueba de fuego para la pareja, en la que quedaran en evidencia sus costuras. Todo ello bajo el contexto de una descabellada y absurda Noche de juegos.Nada será lo que parece.
Así como hace unos años, muchos de nosotros, asistimos estupefactos a la constante proliferación de centros deportivos especializados en padel, y el que más y el que menos sucumbió y acabó practicándolo. Las Escape Rooms, salas que plantean un juego en primera persona, en las que necesitas formar equipo con más gente y en las que has de ir descifrando puzzles, acertijos, y articulando una historia con la que poder salir de una habitación bajo un limite de tiempo predeterminado, se han puesto de moda por todo el mundo.
No sabemos cuánto tiempo durará la moda de las Escape Rooms, pero de lo que sí tenemos total certeza, al igual que el guionista de la cinta Mark Perez y los realizadores, John Francis Daley y Jonhatan Goldstein (Vacaciones) es que vienen a satisfacer un ansia de inmediatez y de estímulos la mar de peregrinos, cuya función no viene a ser otra que aliviar nuestra rutina y alejarnos de las neurosis y crisis propias del tercer milenio.
Netflix vuelve a apostar por la comedia inteligentemente. Ejemplo de ellos son las dos apuestas que aterrizan directas en su top de las más vistas en este marzo de 2020: Un pequeño favor y la que nos ocupa, Noche de juegos.
Los protagonistas de la cinta son parejas de mediana edad, inmersos en un abismo de cotidianidad y aburrimiento, en el que hacen todo lo posible, cual funambulistas, por mantener firme la máscara de su propio ego.
Las frustraciones, los anhelos de juventud, las derrotas sufridas y los fantasmas del pasado, son una realidad pegajosa de la cual es imposible desembarazarse. De ahí la importancia de celebrar noches de juegos con los amigos y apearse de los problemas.
Los creadores de la película, tanto los realizadores como el guionista, se sirven de elementos tales como las dudas sobre la paternidad, los celos, las infidelidades, la pérdida de noción de la realidad, el miedo y las muescas en el alma, para hacer comedia a todo trapo; a base de cañonazos y guantazos en la cara.
La estética puede resultarnos naif de primeras (esas transiciones entre secuencias emulando la vista aérea del Monopoly o cualquier otro juego de compraventa de inmuebles) y los personajes cándidos y peripatéticos. Pero el subtexto de las descacharrantes situaciones, esconden un deje cáustico y amargo, en la línea de las también exitosas Perfectos desconocidos de Alex de la Iglesia o Death at a funeral de Frank Oz.
Noche de juegos de Netflix, con su inagotable batería de giros de guión y chistes procaces e inverosímiles, no deja de ser una sátira sobre la alienada y chamuscada clase media. Tan ridículos vienen a ser nuestros complejos y nuestras afecciones vitales, como el camino que tomamos para evadirnos de ellas desesperadamente. De ahí que lo importante, tanto en la película (como en la vida) no sea el qué, sino el cómo.
Mención aparte merece el papel del siempre acertado Jesse Plemons (Gary) que interpreta a un policía viudo y vecino de Max y Annie y que jugará un papel fundamental en el desarrollo de la cinta. Además de la brutal química que desprenden Jason Bateman y Rachel Macadams.
Destacar también el trabajo de cámara de Barry Paterson: El plano secuencia, con el huevo de Fabergé como protagonista, es genial y probablemente suponga el broche de oro a una comedia redonda, que no nos cansaremos de ver con el paso del tiempo.
Noche de juegos de Netflix resulta un apuesta ágil, fresca, divertida y sorprendente. Si quieres pasar un buen rato, no tienes más que hacernos caso a nuestra crítica de la película Noche de juegos. Esperamos tus comentarios.
Esta entrada fue modificada por última vez en 2 abril, 2020 16:09
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