Basada en la novela homónima de Arturo Pérez-Reverte, se estrena en España ‘La piel del tambor’, un Thriller, que recuerda mucho al cine clásico de espías, ambientado y rodado en la contemporánea Sevilla. Aquí os dejamos con nuestra crítica de la película La piel del tambor.
Richard Armitage da vida al padre Quart, enviado de la Santa Sede a España tras sufrir esta un Hackeo que advierte de dos asesinatos ocurridos en la iglesia de Nuestra Señora de las Lágrimas, la cual “mata para defenderse” de quienes la quieren derribar en aras de una operación inmobiliaria. En medio de la intriga, Quart conoce a Macarena Bruner (Amaia Salamanca), descendiente de la mujer en cuyo homenaje se erigió la iglesia y contraria a su demolición.
El título internacional, que poco tiene que ver el original (“The man from Rome”, El Hombre de Roma) es de tal literalidad y embrutecimiento que sirve mejor como preámbulo de lo que se va a ver en los siguientes 100 insulsos minutos.
Sergio Dow dirige una película con una premisa a priori más interesante que original, pero que no tarda mucho en perder el gancho y con una puesta en escena bastante insulsa.
Aunque se hayan perdido las vidas de dos personas, a lo largo de la película La piel del tambor no hay demasiadas señales de que el protagonista esté corriendo demasiado peligro. La posible demolición de una iglesia es un buen telón de fondo para la subtrama de drama matrimonial que tiene “La piel del Tambor”, pero no parece algo lo suficientemente dramático para lo que pretende ser un intenso thriller.
Otro punto en que la película La piel del tambor es, o bien muy torpe, o muy vaga, es en cierta tensión romántico-sexual entre Quart y Macarena que ocurre simple y llanamente porque tiene que ocurrir, porque es algo que siempre funciona bien. Pero en ningún momento hay química alguna entre ellos, ni parece que podría llegar a pasar nada, ni se lleva esa relación a ningún punto comprometedor
Quizá, más que de la premisa, la culpa sea de una elección de planos, un montaje y una iluminación que, sin ser catastróficos, tampoco podrían ser menos sugerentes. En una época anterior a la de las grandes series de las plataformas de streaming, no pocos habrían dicho que la estética tan poco “artística” de esta película es más propia de la televisión que del cine.
En la misma línea van a las actuaciones. Richard Armitage fracasa totalmente a la hora de darle piel a un protagonista carismático y creíble. Más que el arquetípico tipo duro, enigmático y silencioso que se pretende, el británico, recordado principalmente por su papel como Thorin Escudo de Roble en la trilogía de “El Hobbit”, encarna un personaje cliché y absolutamente vació, sin ningún trasfondo emocional. El arco de expresiones del protagonista oscila unicamente entre una violenta seriedad que ni el propio Armitage se cree, y la nada más absoluta.
Lo peor es que el sacerdote matón, con algo tan simple como ser sacerdote, ya es, de hecho, un poco más original que los demás. Hay toda una batería de clichés unidimensionales como la chica guapa como interés romántico del protagonista, los jefes cínicos, el especulador inmobiliario malvado ex de la chica guapa y hasta el friki de los ordenadores.
Una decisión terrible de producción de la película La piel del tambor ha sido rodar toda la película en inglés. Es de perogruyo que cuando aparece Quart en pantalla no se van a dirigir a él en castellano. Pero para un español que vea la película en versión original, se hará terriblemente incómodo ver a actores españoles, que interpretan a personajes españoles hablar o incluso discutir de cosas muy serias en un idioma que, se nota demasiado, no es el suyo. No se están negando las aptitudes ni la profesionalidad del reparto, pero esta es una dificultad añadida no solo innecesaria, sino que puede acabar obstaculizando también la inmersión y el compromiso emocional de cierta parte del público español (y recordemos que estamos hablando de una producción patria). Es posible que alguien se deba de ir planteando que los angloparlantes también saben leer subtítulos.
La película La Piel del Tambor (2022) es una propuesta que apunta a algo interesante, pero que fracasa a la hora de generar tensión. Culpa tanto de unos personajes demasiado estereotípicos y vacíos, de unas interpretaciones muy mejorables (seguramente, en gran parte culpa de lo primero), como de una realización y puesta en escena tampoco muy ocurrentes.
Título original: La piel del tambor
Género: Thriller
Sitio Oficial: La piel del tambor
País: España
Idioma: Inglés
Fecha de estreno: 21 de octubre de 2022 en cines
Productora: Redwood Films
Distribuidora: Flins y Pinículas
Duración: 116 min.
Año: 2022
Calificación por edades: No recomendada para menores de 12 años
Dirección: Sergio Dow
Guion: Adrian Bol, Beth Bollinger, Judith Gwilt Yturriago, Carolina López-Rodríguez
Música: Roque Baños
Fotografía: Aitor Mantxola
Reparto: Richard Armitage, Amaia Salamanca, Fionnula Flanagan, Paul Freeman, Paul Guilfoyle, Alicia Borrachero, Joe Manjón, William Keen, Carlos Cuevas, Unax Ugalde, Jorge Sanz, Rodolfo Sancho, Peter Vives
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La película NO es buena para un público acostumbrado a ver intelecto satírico demoledor. Empero, es uun verdadero disfrute para los cinefilos a.antes del cine descanso y admirador de los detalles y entorno de la cinta. Además, diálogos entendibles básicos y cineastas