Denso, aburrido, e interminable batiburrillo de géneros sin pies ni cabeza. Un desastre de proporciones trasatlánticas. O del tamaño del piano del personaje de Rodrigo de la Serna. El espectador que claudique ante la invasiva publicidad de la cinta, y acabe comprando una entrada, saldrá de la sala como un ser humano derrotado y despojado de cualquier atisbo de fe, preguntándose, cómo, tal sucesión de palos de ciego, gags sin gracia, y tramas inacabadas e inconexas, pudo recibir luz verde para zarpar. Vayan recogiendo los bártulos, aunque el calendario diga lo contrario, Yucatán, de Daniel Monzón, certifica que el verano acaba de terminar.
En un crucero de grandes proporciones, con dirección a América, se dan cabida toda una miríada de personajes extravagantes y caricaturescos. Destacando entre ellos el pianista del crucero (Rodrigo de la serna); un extraño y bisoño polizón (Luis Tosar); y una actriz de variedades encargada de animar las noches del barco (Stephanie Cayo). Los tres, estafadores y antaño socios, van en busca de la fortuna de Antonio (Joan Pera), uno de sus pasajeros.
No nos andemos con rodeos, cómo Daniel Monzón, autor de la infravalorada y genial “El corazón del guerrero”; las notables: “La caja de Kovak” y “El niño”; y el crudo y sin cortar thriller carcelario, “Celda 211”, una de las mejores películas españolas en lo va de siglo, ha sido capaz de realizar Yucatán. ¿Cómo?. ¿Acaso mientras estaba escribiendo el guión (del cual también es autor Jorge Gerricaechevarria) en ningún momento se planteó la posibilidad de dejarlo o reescribirlo o pedir una segunda, tercera, cuarta opinión? ¿Acaso mientras se rodaban las secuencias, nadie se dio cuenta de que “algo” no casaba? ¿Acaso el productor o el editor, con todo el material ya montado, no se plantearon sacarse toda la paja de encima? Obviamente la respuesta a todas estas preguntas es: no. Además, por si faltase poco, Yucatán dura 130 minutos, dos horas y diez, viniendo a corroborar para los más escépticos (no todo iban a ser malas noticias) la veracidad de la teoría de la relatividad de Einstein.
Y es que, a pesar de la multitud de tramas que, como si de un grupo de gente hablando hasta las cejas de cocaína se tratase, nacen, no terminan de llegar a ningún sitio y, desde luego, no parecen importar nada a las demás; a pesar de unos actores sobreactuados, que irradian tedio y cansancio; a pesar de unos gags, pretendidamente descacharrantes, que provocan sonrojo, y te obligan a girar la cabeza y mirar al espectador de al lado para cerciorarte de que no eres tú sólo el que tiene el problema; a pesar de todo ello, el mayor error de la película es que pretende ser muchas películas a la vez: desde el humor zafio, transgresor y con ánimo de soliviantar al personal, como podría ser cualquiera de la saga de Torrente; pasando por el humor disparatado a lo Aterriza como puedas; cine de enredo, sorpresas, y estimulantes giros de guión (Ocean´s eleven) o comedia romántica tipo Campanella (El mismo amor, la misma lluvia; El hijo de la novia)
Y claro, pretender abarcar toda clase de sensibilidades (o ampliar el famoso “Target” hasta el paroxismo), sin decantarse por ninguna, provoca que, el resultado final, sea un artefacto amorfo, sin alma: una botella de coca-cola de dos litros, abierta en la nevera, que hace días que perdió todo el gas.
En definitiva, un disgusto cinematográfico en toda regla, y que el espectador, con un mínimo de sensibilidad y cultura audiovisual, se debería ahorrar por su bien, y más teniendo en cuenta el talento contrastado de todo el equipo técnico y artístico.
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Es un horror... Insoportable, soporífera, la peor manera de tirar el dinero para ver un castigo en forma d web película
Ni tan siquiera soporífera porque te vas cabreando poco a poco, lo que te impide echar una cabezada. No vuelvo al cine dejándome llevar por el marketing televisivo.
ESTO ES UN PRODUCTO MAS DE LO QUE MANDA AHORA DE LOS GRANDES (TELECINCO, ATRES MEDICA, ETC.) A MI SE ME HIZO LARGA Y ES UNA PENA CON LOS BUENOS ACTORES QUE HAY EN LA PELÍCULA. ESO SI EN LA CADENA MACHACANDO TODO EL DIA CON LA PUBLICIDAD DE LA MISMA Y PREGUNTANDO A GENTE QUE SALE ... SUPUESTAMENTE DE VERLA Y PONIÉNDOLA POR LAS NUBES. PATÉTICO.
Yo creo que es una película muy entretenida y bien rodada. Un cine español actual equiparable al que se hace tanto en Europa como en América.
He pasado un buen rato y también los amigos con los que he ido.
Bodrio infumable. Aguanté poco más de una hora y se me hizo eterna, aburrida, guión inconexo, mala, muy mala...
es malísima. me salí a la hora de empezar porque es insufrible. Ni es de risa , ni tiene pies ni cabeza. una de las peores películas que he visto. no entiendo como un actor tan maeavilloso como es Luis Rodar, se presta a este tipo de guiones y películas infumables