Película El glorioso caos de la vida: Crítica

La película El glorioso caos de la vida nos presenta la historia de amor entre dos jóvenes: Milla enferma de cáncer; Moses atrapado en el consumo de drogas. El destino querrá que se unan para ayudarse mutuamente en su trágico día a día. Hoy os dejamos nuestra crítica de la película El glorioso caos de la vida, un drama adolescente tratado de forma adulta. 

Sinopsis

Milla Finlay (Eliza Scanlen) es un adolescente enferma de cáncer que encuentra su primer amor en los brazos de Moses (Toby Wallace), un joven traficante de drogas al cual le han echado de casa.

La película El glorioso caos de la vida llega a los cines el viernes 21 de agosto de 2020.

Crítica de la película El glorioso caos de la vida

Normalmente las películas dramáticas con protagonistas adolescentes suelen contar su historia de manera edulcorada y bastante naif. La película El glorioso caos de la vida (cuyo título original es Babyteeth) opta por usar una técnica completamente opuesta a cintas como ‘A dos metros de ti‘ o ‘Bajo la misma estrella‘, narrando así su historia de un modo adulto, doloroso y sin tapujos. El espectador adolescente será tratado como lo que es, un adulto.

Tratando a los adolescentes como adultos

Dicho esto, no significa que la historia que nos presenta no la hayamos visto antes en múltiples y variadas ocasiones. Lo único que cambia es su tono, más adulto, y en el que además podemos apreciar una puesta en escena indie con una estructura fragmentada a modo de redes sociales. Pero en lo concerniente a su trama es bastante convencional.

De qué va la propuesta de El glorioso caos de la vida

En la película El glorioso caos de la vida conoceremos la historia de amor entre Milla Finlay (Eliza Scanlen) y Moses (Toby Wallace). Dos chavales jóvenes, ella más que él, que comienzan una apasionada historia de amor. El drama de su idilio vendrá marcado por la terrible enfermedad que sufre Milla, un cáncer que no deja de progresar. Moeses, un joven con su propia problemática en el mundo de las drogas, se convertirá en el único sustento y la ilusión de Milla durante el desarrollo de su enfermedad.

La dirección de Shannon Murphy

La australiana Shannon Murphy se estrena en la dirección con la que nos ocupa de forma más que notable, aunque también podemos afirmar que bastante pretenciosa. Quizá ese será el aspecto que menos guste al espectador, las ansias que se dejan notar durante todo el relato de resultar narrativa y estéticamente indie.

La película El glorioso caos de la vida funciona mucho mejor cuando su directora olvida sus pretensiones de ser galardonada en ‘Sundance’, y la historia fluye por sí misma. Así, deja su sostenido encorsetamiento para mostrarnos situaciones durísimas narradas de manera natural, sin cargarse de artificios ni diálogos impostados. De tal forma que logrará dejarnos con los sentimientos a flor de piel, sin caer nunca en el sentimentalismo fácil propio de dichas situaciones.

Toby Wallace y Eliza Scanlen, la pareja protagonista

Uno de los principales alicientes será disfrutar del trabajo interpretativo realizado por la pareja protagonista. Ambos completamente brillantes y creíbles en sus respectivos papeles. Toby Wallace, ganador en Venecia del galardón a actor revelación, interpreta a Moses. Un veinteañero de look trapero castigado por el mundo de la droga; adicción que además le ha costado que su familia reniegue de él. Eliza Scanlen es Milla. Una quinceañera de familia de clase acomodada que vive inmersa en su propia lucha contra el cáncer. Su único aliciente, y su mejor medicina, en una vida tan castigada por la enfermedad, será su nuevo y primer gran amor.

Opinión final de la película El glorioso caos de la vida

La película El glorioso caos de la vida es un canto a la vida que invita a disfrutar del momento presente, sin temores a lo que pueda pasar el día de mañana. Lo que tenga que llegar, irremediablemente llegará.

Trailer