Crítica de la película “Dos tontos todavía más tontos”: Dos tontos muy tontos 2

Se cumplen veinte años desde que conocimos a una de las parejas más inusuales del mundo de la comedia: Harry Dunne y Lloyd Christmas; aunque quizás os resulten más familiares si les llamamos “Dos tontos muy tontos”. Pues bien, hoy llega “Dos tontos todavía más tontos” o “Dos tontos muy tontos 2” con nuevas y ridículas aventuras que seguro os traerán buenos recuerdos.

Sinopsis de la película “Dos tontos todavía más tontos”

Ha pasado ya mucho tiempo desde la última vez que vimos a Harry (Jeff Daniels) y Lloyd (Jim Carrey) y nuestros -entonces- jóvenes amigos han madurado, aunque sólo sea de forma física. Ahora, Harry sufrirá los efectos de la madurez y su salud se interpondrá ante la alocada vida que solía llevar. Pero si por algo recordamos a estos dos personajes, es por su visión optimista de la vida y por su capacidad para buscar soluciones (un tanto dudosas) a cualquier problema que se les ponga por delante. Así que tranquilos, porque podréis volver a acompañar a estos dos tontos en una nueva aventura en la que el objetivo es encontrar a hija (Rachel Melvin) de Harry, desconocida para él hasta el momento, para pedirle un riñón y salvar su vida.

Crítica de la película “Dos tontos todavía más tontos”

“Dos tontos todavía más tontos“ (Dumb & Dumber To) vuelve después de mucho tiempo con un solo propósito: volver a hacernos reír. El caso es que ya sabemos los riesgos que se corren con las segundas partes, de modo que los directores Bob y Peter Farelly (a los que también conocemos por ‘Algo pasa con Mary’ y ‘Yo, yo mismo e Irene’) han decidido no complicarse demasiado y traernos un filme con un desarrollo muy similar al de la primera parte, es decir, estructurado según el patrón de la road movie: un viaje plagado de experiencias que demoran la llegada de un final desconocido. En la primera parte, es Lloyd quien propone ir a Aspen por amor, pero esta vez será Harry quién convenza a su amigo para embarcarse en un viaje cargado de vivencias que ni ellos mismos esperan. Y, como era de esperar, no faltarán los típicos enredos, la solución de problemas graves mediante acciones estúpidas y, un clásico de esta saga, el objeto de gran valor que cae en manos equivocadas.

De todas formas hay que tener en cuenta que el uso de recursos rescatados quizás resulte pesado, ya que da la impresión de que eso es algo que ya se ha visto antes, a pesar de que haya cambiado de contexto. Es decir, que aquello que en una primera parte hizo de una comedia simple un largometraje con el que pasar un buen rato, en esta segunda “Dos tontos todavía más tontos” bien podemos digerirlo como más de lo mismo.

Pero dejando de lado lo referente al montaje, si algo hay que destacar es la interpretación de Jim Carrey (‘Kick ass 2, con un par’). No voy a engañaros, el actor ya no es el joven ‘Ace Ventura’, pero hay que reconocer que su talento a la hora de dar vida a personajes que podemos denominar como “diferentes” sigue fresco. Jeff Daniels tampoco está mal, pero quizás le falte un diente roto, un peinado de orinal o algún rasgo que le haga parecer más cómico a simple vista. En cualquier caso, no debemos dejar de lado el hecho de que nuestros protagonistas no actúan de forma individual, sino como pareja y en ese sentido han sabido mantener en esta  “Dos tontos todavía más tontos” el espíritu de la primera parte.

Resumiendo, si os gustó la primera parte seguramente se os hará agradable volver a ver a Lloyd y a Harry, y compartir con ellos una nueva experiencia en “Dos tontos todavía más tontos”. Pero si sois más de humor inteligente y no aguantáis casi dos horas junto a dos paletos, manteneros alejados de este film y ahorraréis dinero, energía y, seguramente, algún que otro comentario fuera de lugar.

Trailer de la película “Dos tontos todavía más tontos”