Crítica de la película “Frío en julio”: Parábola del buen enmarcador

Llega a la cartelera una de las imprescindibles de este 2014 bajo el título de “Frío en julio”. Un thriller que le ha valido a Jim Mickle ganar el título a mejor director en esta pasada edición de Sitges.

Sinopsis de la película “Frío en julio”

Años 80, Texas. En plena madrugada un asaltante entra en casa de Richard (Michael C. Hall). Este padre de familia, de intachable reputación, disparará al asaltante a fin de salvaguardar a su familia. Este asesinato le valdrá para ser alzado como héroe local, arrastrándolo sin más remedio hacia a una trama de violencia y corrupción.

Crítica de la película “Frío en julio”

Jim Mickle se alza con el título de mejor director de Sitges, con este thriller titulado “Frío en julio” que cuenta con un elenco de honor, la historia de cómo la vida más sencilla de un hombre puede truncarse en un abrir y cerrar de ojos.

Poseída por la esencia de Carpenter, Walter Hill o William Lusting, con una portentosa BSO entre lo indie y lo ochentero, actores reconocidos como Don Johnson (Miami Vice, Django: desencadenado) o Sam Shepard (El informe pelícano, Magnolias de acero) que junto con Michael C.Hall (Dexter) bordan la película y un guión que mantiene en vilo al espectador hasta el último momento, llega a los cines “Frío en julio” un thriller inquietante con aires de Pulp Fiction.

Richard es un padre de familia que vive con su mujer y su hijo en Texas, tiene una tienda para enmarcar cuadros y todo parece de color de rosa, hasta que una noche un intruso entra y lo asesina en defensa propia. La vida de Richard cambiará por completo cuando descubra que la policía le ha tendido una trampa y que la persona que supuestamente ha matado no es quién la policía dice que es. Junto al padre del supuesto asesinado (Shepard) y un detective privado (Johnson), se embarcará en una aventura espectacular de violencia, engaños y venganza.

La sorpresa es mayúscula cuando una simple película cuyo protagonista sólo bebe vasos de leche y limpia la casa, da un giro inesperado y se convierte en una historia de lo más perturbadora, una trama que atrapa, no sólo por la capacidad de generar tensión sino por la destreza para conmover y desagradar al mismo tiempo. La fuente de inspiración de esta “Frío en julio” es una novela de 1989 de Joe R. Lansdale, prolífico escritor y experto en artes marciales al que Mickle descubrió a través de la película “Bubba Ho-Tep”.

Respecto a Jim Mickle cambia de género y se pasa del cine de terror al thriller policiaco (sin eliminar esas pinceladas macabras), muy propio de los ochenta, pero que en la actualidad cuesta bastante encontrar en una sala de cine. Conocido por cintas como “We are what we are” o “Mulberry street” el director sorprendió en el Festival de Sitges con esta pequeña joya que seguramente volverías a ver una y otra vez sin cansarte.

Michael C. Hall, al que perdí la pista desde que terminó la serie Dexter, vuelve dando guerra; es maravilloso que tras el largo parón del actor, debido al cáncer linfático que padecía, vuelva y no sea en una serie. Esperemos que este gran actor siga deleitándonos en la pantalla grande demostrando su gran talento -no sólo como asesino/forense-.

Trailer de la película “Frío en julio”