85th Academy Awards
Pues sí, parece que fue ayer cuando Jean Dujardin demostró en el Kodak Theatre que sabía hablar, aunque fuera una macarrónica mezcla de inglés y francés, y este domingo volverá a celebrarse otra gala de los Oscar, con todo lo que ello conlleva: Vestidos, smokings, escotazos, y locutores de Canal Plus diciendo por enésima vez, pero con tono de maravillosa revelación, que Gwyneth Paltrow vivió en Talavera.
Así como hay ciertos temas, como el terrorismo vasco o la violencia doméstica, de los que es más sensato hablar cuando se está a una cierta distancia, en los Oscar es condición casi indispensable residir en Los Angeles para palpar el ambiente y adivinar quiénes pueden ser los afortunados ganadores. Y es que creo que no descubro la pólvora si digo que estos premios son una megalómana campaña de marketing y su paradero se cocina en los cientos de eventos y fiestas previas.
Sin embargo, sí que hay ciertos parámetros que se pueden analizar para, si no vislumbrar los vencedores, al menos amortiguar el chasco de ver que no gana el favorito de uno.
Hace ya algunos años que a algún iluminado se le ocurrió ampliar el número de nominadas a diez. Supongo que sería para dar promoción a más películas porque, salvo excepciones, las premiadas en los Oscar no se comen ni un rosco en la taquilla americana. (Piense usted que es porque los americanos son una panda de analfabetos obesos o porque ellos no se sienten en el compromiso de demostrar su intelectualidad a diario y, si una peli con un niño y un tigre les parece un mojón de kilo y medio, no gastan dos horas de su vida en verla).
Desconozco si tal estrategia ha surtido efecto, pero lo que sí que se nota es cierto abaratamiento en la categoría. Vale que esta década de los dos mil para acá no es para tirar cohetes (¿Dentro de 50 años alguien recordará “El discurso del Rey” o “Heart Locker” como hoy se recuerdan ”Ben-Hur” y “El Apartamento”?) pero ver debajo de “Mejor película” los nombres de “Moneyball” o “The Blind side” da cosica.
Y es que empieza a cantar un poco que las nominadas respondan siempre a un mismo patrón: El primero: La indie: Peli independiente “sorpresa” de la temporada (y noten las comillas de sorpresa) . Este año el honor recae en “Beasts of the southern wild”, como en 2011 recayó en “Winter’s Bone” y en 2010 en “Precious”.
Luego está “La comedia”, generalmente buenrollera y con un cierto aire “indie” o reivindicativo. Ahí está “El lado bueno de las cosas” este año, recogiendo el testigo de “The Help” (2012), “The Kids are all right” (2011) o “Up in the air” (2010)
Después siempre se cuela una peli de autor, la que parece decir: “Eh, aquí hacemos el mono y nos vestimos de Armani, pero nos gusta la vanguardia cinematográfica como a los que más”. El Michael Haneke de este año con “Amour”, es el Terrence Mallick del año pasado con “El árbol de la vida” o el Christopher Nolan de 2011 con “Inception”.
¿Cansados? Pues aún me queda otro apartado: El de los “Antiguos alumnos”. Directores que han ganado un Oscar en la última década y a los que se les permite unirse a la fiesta por los viejos tiempos. Ahí está Ang Lee (premiado por “Brockeback mountain”) nominado este año con “Vida de Pi”. El año pasado fue Stephen Daldry con “Extremely loud and incredibly close” y hace dos, Danny Boyle con “127 horas”
Estas películas suelen irse de vacío o llevarse algún premio suelto (Las indies tienden especialmente a llevarse el de “Mejor guión”, por ejemplo) pero no suelen estar cortando el bakalao ni llenan portadas al día siguiente.
Ese privilegio recaerá este año en una de estas: “Argo”, “Django desencadenado”, “Lincoln”, “Los miserables”, y “La noche más oscura (Zero Dark Thirty)”. Sin entrar en la opinión personal que tengo de ellas (la cual agotaría el ancho de banda de esta revista digital, se lo aseguro), cada una tiene sus pros y contras para ser la triunfadora de la noche.
Si nos guiamos por los premios previos a los Oscar (Los globos de oro, el sindicato de directores, de productores, de taquilleros del metro de Los Angeles), “Argo”, con toda seguridad, debería ser la ganadora en este apartado, ya que ha arrasado en todos ellos. La verdad es que tiene buenos argumentos para ello: Es una película redonda, funciona como película de género para todas las audiencias y, sobre todo, cuenta una historia de supervivencia netamente norteamericana y, para mas inri, basada en hechos reales, ¡y donde aparece muy bien parado Hollywood!
Sin embargo, hay un dato que seguro que perturba la cabeza de Ben Affleck (visto que sus negadas dotes para la interpretación no le molestan lo más mínimo) y es que él no está nominado en la categoría de mejor director. Si no me equivoco, solo una vez ha ganado una película en esas condiciones. Fue “Paseando a Miss Daisy”, en 1989.
Y la película que aparece como alternativa no es precisamente débil. Se trata de “Lincoln”, una película con hechuras de clásico (Biopic de presidente norteamericano, historia de superación con reivindicación social) y dirigida por el mismísimo Steven Spielberg.
Así que salvo sorpresa, una de esas dos será la ganadora de la noche, ya que intuyo que la academia ve a “Django desencadenado”, “Los miserables” y “La noche más oscura (Zero Dark Thirty)” demasiado friki, descafeinada y revolucionaria respectivamente.
PRONOSTICO: Argo 60% | Lincoln 40%
Para que veamos que los españoles no somos los únicos raros al nominar películas (aunque parece que últimamente se ha corregido la costumbre de mandar a los oscars una película diferente a la que consideramos la mejor en los Goya), los directores de la academia no podrán elegir al que, según ellos mismos, es el mejor del año: Ben Affleck.
La no elección del director de “Argo” nos sorprendió a todos, ya que respondía perfectamente al perfil de director premiado: Joven, actor (con todos los contactos que ello supone) y con una tercera película (tras dos reconocidas por la crítica) solvente y con opciones de llevarse la estatuilla a la mejor película.
Sin embargo, su ausencia aclara bastante el pronóstico de este año. Salvo que a la Academia se le ocurra darse aires de intelectualidad y premiar a Michael Haneke por esa obra maestra llamada “Amour”, parece ser que el premio se lo llevará el maestro Steven Spielberg por “Lincoln”.
Un Oscar al maestro Spielberg nunca será inmerecido, pero parece que el de este año casi se da por eliminación, ya que O’Russell, Lee y no digamos Zeitlin, no parecen rivales.
PRONÓSTICO: Steven Spielberg 90% | Michael Haneke 10%
Si ésta parece que va a ser la noche de “Lincoln”, el premiado debería ser Daniel Day Lewis, máxime cuando cumple tres premisas muy bien miradas por los miembros de la Academia: Encarna a un personaje histórico, ha sufrido una notable transformación física y elabora una interpretación profunda con la que ya ha levantado dos estatuillas, por “Mi pie izquierdo” y “Pozos de ambición”.
Y tal vez ese sea el principal obstáculo que Day-Lewis tenga que sortear para conseguir el Oscar: Ya se ha llevado dos estatuillas y la Academia se lo piensa muy mucho antes de otorgar el tercer galardón (El máximo ejemplo es Spielberg, nominado innumerables veces y cuyo último Oscar data de 1999)
El resto de candidatos casi cuentan con las mismas probabilidades. Salvo Bradley Cooper, tal vez el más desconocido y que tiene la desgracia de participar con una comedia. (Un género maldito para los premios, parece que hacer reír es mucho más fácil que llorar delante de Auswitz)
PRONOSTICO: Daniel Day Lewis 55% | Denzel Washington 15% | Hugh Jackman 15% | Joaquin Phoenix 15%
Una vez más nos encontramos con que ninguna de las actrices en la terna está en las películas favoritas. (La última actriz que consiguió la estatuilla trabajando en la mejor película del año fue Hillary Swank en 2004 por “Million Dólar Baby”, lo cual le significó poder trabajar posteriormente en… Un momento, ¿Hillary Swank sigue viva? ¿Alguien ha visto algo suyo desde entonces?)
Tal situación nos podría llevar a amplias reflexiones, la mayoría de ellas feminazis, acerca del machismo de la industria del cine, la escasez de papeles femeninos relevantes o el desdén de la Academia por las historias “de mujeres”. Como esto no es el Palacio de los Congresos ni yo soy un actor con una pegatina de “No a la guerra”, dejaré de lado las reivindicaciones “políticas” y me centraré en los premios.
La cabeza nos dice que Jessica Chastain debería situarse en cabeza, por protagonizar “La noche más oscura”, película que al menos está nominada entre las mejores. Es una actriz pujante (Con un perfil a lo Hillary Swank cuando ganó por “Boys don’t cry” o Marion Cotillard con “La vie en Rose”) y lleva una trama seria y política.
Sin embargo, el corazón nos dice que tal vez los académicos se decanten por otros dos perfiles irresistibles: La abuelica y la niña desvalida. Usease, Emmanuelle Riva por “Amour” (Que es la que más se lo merece) y Quvenzhane Wallis por “Beasts of the southern wild”. Colocar a ambas intérpretes en el mismo párrafo produce urticaria, pero es lo que tiene la Academia…
Que ganara Jennifer Lawrence sería para mí una sorpresa, ya que da la sensación de que ya se le ha premiado con la nominación. Pero no descarto para nada a “nuestra” (qué manía de considerar a todo aquel que trabaja con un español como nacido en Navacerrada) Naomi Watts, ya que responde al perfil de “actriz reconocida en Hollywood que, tras varias nominaciones, termina llevándose el Oscar por una película ignorada en el resto de categorías pero en la que superan los decibelios de tremendismo.” Y si les suena rara la ecuación, miren los nombres de siete de las últimas ganadoras y sus películas: Natalie Portman (Cisne negro), Meryl Streep (La dama de hierro), Kate Winslet, (Las horas) Sandra Bullock, (The blind side) Hellen Mirren, (The Queen) Reese Witherspoon, (Walk the line) Charlize Theron. (Monster)
PRONOSTICO: Emmanuel Riva 25% | Naomi Watts 25% | Jessica Chastain 25% | La niña repelente 25%
Al igual que en la categoría de actor principal, si ésta es la noche de “Lincoln”, Tommy Lee Jones debería llevarse la estatuilla sin pestañear, ya que argumentos acarrea de peso: Actor numerosas veces nominado, con un buen calado en la industria y que borda un papel histórico y encima, agradecido.
Considerando aventurado que Cristopher Waltz se pudiera llevar un segundo Oscar y que Alan Arkin, siendo un pedazo de actor, realiza una tarea en “Argo” que no pasa de simpática, los principales contrincantes del enemigo de Harrison Ford en el “Fugitivo” serían Philip Seymour Hoffman, que hace un papel merecedor de Oscar pero al que da la sensación de que le falta más gasolina en forma de promoción de su película y Robert de Niro, que tras unos años paseándose por películas para abordar su catering parece que ha ganado un poco de respeto con “El lado bueno de las cosas”. Ojito, Tommy.
PRONOSTICO: Tommy Lee Jones 80% | Robert de Niro 20%
Puede que me deje llevar por los colores, pero Anne Hathaway me parece la clara favorita de la terna. No solo porque su pieza “I dreamed a dream” en “Los Miserables” sea capaz de remover emocionalmente a una cuadrilla de aizkolaris, sino porque se come con patatas a sus potentísimos compañeros de reparto y porque, además, cuenta con el aval de una labrada carrera en Hollywood que pide a gritos ser reconocida. (Lo que es una pena es que no lo vaya a ser nunca por su vis cómica, enorme y que la colocan ya por encima de supuestas heroínas de la materia como Carole Lombard o Katharine Hepburn)
Dentro de sus contrincantes destaca tal vez Sally Field por “Lincoln”, que como sus compañeros de reparto aborda un papel muy agradecido con enorme solvencia.
Helent Hunt, Amy Adams y Jacki Weaver, si las cosas van como deberían, aguardaran otro año para abordar la estatuilla con el bagaje de “ya fui nominada X veces y no me lo disteis, vejestorios”
PRONOSTICO: Anne Hathaway 95% | Sally Field 5%
Personalmente, la categoría en la que tengo más curiosidad por ver quien resulta ser la ganadora. Y es que, aunque parezca mentira, aquí se mide un interesante pulso entre la supuesta “creatividad artística” y la “industria pura y dura”. Me explico.
Como ustedes ya sabrán (y si no se lo digo yo ahora mismo) las votaciones en cada categoría las realizan los académicos que se dedican a esa tarea en concreto (los directores votan a los directores, los guionistas a los guionistas y así sucesivamente). Esto ha provocado que, por aquello de que son los más ninguneados de la industria y por una vez pueden hacer lo que les de la gana, en los últimos años hayamos asistido a premios en esta categoría para películas como “Eternal Sunshine of Spotless Mind”, “Almost Famous” o, sin ir más lejos, “Midnight in Paris” el año pasado. Películas que, sin ser desconocidas en la Academia, eran muy minoritarias en los premios y compartían un riesgo o una actitud artística de las que carecían las mayoritarias. (Con esto no quiero decir que sean más listos los guionistas que los productores, también premiaron a “Juno” y a mí me parece el equivalente cinematográfico a un fin de semana en Guantánamo).
Por otro lado, todos sabemos de las presiones de los lobbys y las productoras en las votaciones (un premio supone una repercusión y, por lo tanto, un empujón en taquilla por el que bien merece la pena organizar unas cuantas fiestas y repartir un montón de regalos). Sin duda los reyes de este juego son los Weinstein, que apoyaron mucho (por no decir que prácticamente se sacaron de la chistera) Oscars para sus películas “Shakespeare in love” o “El discurso del Rey” e intérpretes auspiciados en su abrigo como nuestra Penélope Cruz (la cual, por otra parte, lo merecía ampliamente).
Pues bien, este año se encuentran frente a frente los guiones cien por cien “artie” de “Amour” (Michael Haneke) y “Moonrise Kingdom” (Wes Anderson) con el del ahijado de los Weinstein (Quentin Tarantino) “Django Desencadenado”. ¿Quién ganará? ¿El bolsillo o el corazón?
Del resto de nominadas, cabe darle algo de crédito al libreto de “La noche más oscura” (la retranca es que se considere original con todas las fuentes que, se dice, han consultado). La nominación de “The Flight” suena más a acto de reconocimiento y bienvenida al mundo de la escritura a su autor, el actor John Gatins, que otra cosa.
PRONÓSTICO: Django desencadenado 40% | Moonrise Kingdoom 20% | Amour 20% |La Noche más oscura 10%
Un análisis somero diría que aquí se cocinará el galardón de mejor película, ya que compiten los guiones de las dos favoritas, “Argo” y “Lincoln”, y el guión, se dice, que es la parte más importante de la película.
Sin embargo, tal vez por los razones esgrimidos en la categoría anterior, esto cada vez tiene menos importancia. El año pasado, sin ir más lejos, “The Artist” no ganó nada en esta categoría, y otras películas premiadas últimamente, como “Million Dollar Baby” o “Gladiator” tuvieron la misma suerte.
Cabría pensar entonces, máxime teniendo en cuenta la querencia del sindicato de guionistas por “la indie” del año (“Juno”, “Entre copas” y “Pequeña Miss Sunshine” fueron premiadas, por ejemplo) que “Bestias del sur salvaje” tendría alguna opción de llevarse el galardón, un cuerpo por delante de “El lado bueno de las cosas”, a la que le falta quizá esa pujanza de parecer que se ha hecho con cuatro pesetas.
PRONÓSTICO: Argo 40% | Lincoln 40% | Bestias del sur salvaje 20%
Todo lo fácil que parece pronosticar esta categoría, ya que “Amour” tiene cinco nominaciones en las categorías “oficiales” y parece que con ello se ha ganado el reconocimiento como mejor película de fuera de Estados Unidos, lo tiene de complicado prever qué puede pasar en una votación casi a ciegas, ya que uno sospecha que la mayor parte de los académicos no han visto o pasan soberanamente de ver películas con subtítulos. (Y de repente hemos encontrado una conexión entre Julia Roberts y Yola Berrocal, quién lo iba a pensar)
Así que dando a Haneke como claro favorito, a mí no me extrañaría nada ver subir al escenario del Kodak Theatre a los directores, por ejemplo, de “No” (la denuncia social tira mucho, y la latinoamericana más) o de “Kon-Tiki” (Su título es gracioso y recuerda a un cóctel)
PRONÓSTICO: Amour 90% | El resto 10%
Antes era muy fácil acertar en esta categoría: Ponías una cruz al lado de la película de Pixar y a correr. Eran los mejores y así se les reconocía. Pero desde que los rivales les comieron terreno (plagiándoles a dolor, todo hay que decirlo) y John Lasseter, además de por cerrar historias se preocupa porque tengan repercusión en Disneyworld, todo ha cambiado.
Así que no me extrañaría nada ver subir al escenario a Tim Burton, que a fuerza de venderse y repetirse en sus películas supongo que se habrá hecho muchos amigos académicos, o los Aardman con “Piratas”, por aquello de que tienen un extenso historial y a los pobres se les quemó el almacén y las han pasado canutas.
Algo más raro sería ver con la estatuilla a “El alucinante mundo de Norman” (Una película tal vez demasiado oscura para los niños y demasiado naïf para los oscuros) e incluso “¡Rompe Ralph!”, que siendo magnífica habla de un tema que los académicos desconocen (Videojuegos) y tampoco es que lo haya petado en taquilla precisamente.
PRONOSTICO: Brave 30% | Frankeenwennie 40% | Piratas 30%
Esta entrada fue modificada por última vez en 17 junio, 2017 11:07
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Mejor película, mejor actor, mejor actriz de reparto, mejor película de animación, mejor guión original, mejor guión adaptado y mejor película de habla no inglesa...... siete aciertos en la quiniela, estupenda valoración, ¡enhorabuena!
Los "desaciertos" en actríz, director y actor de reparto son, en mi pobre opinión, fallos garrafales de la Academia. Jennifer Lawence mejor actriz??? ni ella misma se lo creía de ahí el tropezón al subir las escaleras.
Esto de los Oscars acaba siendo siempre lo mismo, al día siguiente lo único que se destaca son los escotes de los vestidos que pasaron por la alfombra roja.