Crítica de la película 1917 de Sam Mendes
Sam Mendes dirige y coescribe con total maestría la película 1917, obra culmine de su cine. Una película llamada a arrasar en todos los premios de la temporada y que pasará a la historia como una obra maestra del cine contemporáneo. Os dejamos con nuestra opinión de la película 1917.
Nos situamos en el campo de batalla de la Primera Guerra Mundial. En el frente occidental, el general británico Erinmore (Colin Firth) encargará una misión técnicamente imposible a los jóvenes soldados británicos, Schofield (George MacKay) y Blake (Dean-Charles Chapman). Tendrán que cruzar el campo de batalla enemigo a plena luz del día, ocupado por los alemanes, para intentar llegar hasta la trinchera donde se encuentra el coronel MacKenzie (Benedict Cumberbatch) y así evitar un ataque que puede suponer la muerte de muchos soldados.
El llamado a proclamarse peliculón del año llega a la cartelera en esta segunda semana de 2020. Sam Mendes nos entrega una obra brutalmente ambiciosa a nivel formal, sólo digna de un genio tras la cámara y de alguien muy perfeccionista y metódico, y de una sencillez tan cercana a nivel narrativo que nos arrastra tras su personaje principal sin poder apenas respirar. Así es la ya ganadora del Globo de Oro y de la que no dudo logrará la misma hazaña con los Oscar. Aquí empieza la opinión de la película 1917.
1917 es esa película que encandilará a cualquier tipo de público. Amantes del bélico, de la fotografía, del cine palomitero… todos disfrutarán de una propuesta tan brutal que es complicado no salir exhausto de la sala de cine. Es más, necesitarás varios minutos para poder verbalizar lo que has visto en pantalla. ¿Cómo se puede rodar una película como esta en un único plano secuencia? Una película que se estudiará en todas las facultades de comunicación audiovisual y que ya forma parte de la historia reciente del cine.
No hay duda que Sam Mendes sólo se rodea de los mejores y escoge a su equipo técnico de manera concienzuda. Y es que otro de los culpables de tanta maestría en la gran pantalla es Roger Deakins (Blade Runner 2049), el director de fotografía de 1917. Para la que escribe, otro maestro que merece todo tipo de reconocimientos.
Juntos, Mendes y Deakins, consiguen que vivamos desde dentro la complicada misión encomendada a los dos jóvenes soldados protagonistas. Hay muchas películas bélicas sí, pero sólo en 1917 lograrás vivir el miedo y la adrenalina de encontrarte en territorio enemigo en plena I Guerra Mundial. Un elemento es clave: cámara al hombro durante todo el relato y seguir en todo momento a sus protagonistas como si fueras un tercer personaje. Pura proeza técnica que como espectadora cansada de tanto CGI se agradece y mucho.
Uno de esos momentos increíbles, de los muchos que viviremos al entrar en la sala, será el ver en plana noche una ciudad tan sólo iluminada por los bombardeos. Sin palabras… no hay lugar a dudas que nos encontramos ante una obra maestra sobre la que no se puede escribir ni un pero.
Pero es que además de la dirección, Mendes coescribe el guion junto a Krysty Wilson-Cairns. Y es que la historia de 1917 surge de los relatos que el abuelo paterno del director, Alfred Mendes, le contó de su paso por el frente de la I Guerra Mundial. Allí su abuelo era mensajero en el frente, y con esta cinta el director ha querido homenajearle al relatar el riesgo que vive un soldado enviado como mensajero y la importancia vital de tal misión.
Desde luego 1917 parte de un argumento sencillo, sin florituras ni giros inesperados, y precisamente ahí radica su fuerza. En resultar veraz y auténtica. Además del despliegue técnico del que ya hemos hablado.
Todo elogio para Sam Mendes es poco para la proeza técnica que veremos en la película 1917. Entrar a la sala de cine resultará una experiencia totalmente inmersiva. Sentirás el barro enfangado a las botas del protagonista, la adrenalina de pensar que algún disparo puede alcanzarle, los bombardeos devastadores que iluminan la noche estrellada, las alambradas que rasgan su ropa… Una película que desde una historia aparentemente sencilla logra ser épica y humana.
No os perdáis la entrevista que realizamos a Sam Mendes durante su visita promocional a Madrid. El director nos cuenta muchos de los secretos que se esconden tras la genialidad formal de su relato.
Esta entrada fue modificada por última vez en 13 enero, 2020 10:07
Crítica de Godzilla y Kong Un nuevo imperio (2024), la película es todo lo que…
Este 27 de marzo el director francés Bertrand Bonello estrena su última película, The Beast…
Crítica de Kung Fu Panda 4, la última entrega de la saga esta vez dirigida…
Tras una importante serie de retrasos y unos cuantos años después de que se anunciara,…
Javier Macipe nos presenta una película impresionante que me niego a considerar como un drama.…
Crítica de El bastardo, película de acción genérica con unas actuaciones pobres y una historia…
Ver comentarios
La película deslumbra con su propuesta de una toma secuencial, pero a la vez esto la hace aburrida por momentos.
esta fea horrible asquerosa terrible mala de calidad musica toda asquerosa
BIEN POR TI NIÑO ESTUPIDO Q NO SABE APRECIAR LAS OBRAS DE ARTE
Técnicamente impresionante. Qué travelling más maravilloso. Sin embargo, no lo es ni el guion ni la actuación de los dos personajes principales. La trama es muy floja. No diré que hay plagio, sino homenaje a dos películas: "Paths of glory" de Stanley Kubrick y "Saving Private Ryan" de Spielberg. Al final, te quedas con un sabor de que algo faltó en la película. Conclusión: filme regular.
Excelente, la acabo de ver..no es la típica película belica de héroe americano. Las escenas, el ambiente , la fotografía, la caracterización, esas trincheras tan reales la hacen diáfana, limpia muy bien desarrollada. Me ha encantado..un bravo
Es genial, como documento histórico y como film. La técnica de secuencia única y continuada hace que penetres en la escena, sientas que dentro de ella. La fotografía espectacular.Una obra maestra.
Efectivamente es una muy buena pelicula en todos los sentidos, desde, la primera secuencia te mimetizas con el soldado cual un nuevo Filipides,genial dentro de la sencillez del argumento.
Magnifica, y rodada en plano secuencia que hace te encuentres, como uno más, en las mismas trincheras de la I guerra mundial, cuando en realidad estás en el sillón del cine. Contraste brutal entre el drama y miseria de muerte en la guerra y la fuerza de la naturaleza en su renacimiento eterno, lo que resalta la película con bellos encuadres de la campiña francesa en los breves descansos de los protagonistas en su peligroso viaje entre las líneas del frente. La muerte se ve presente entre cadáveres de caballos y cuerpos humanos, pero la vida también se ve y está en la leche fresca y en la explosión de la primavera con los cerezos en flor. El atrezzo militar, de la infantería de la época, es una exhibición de exactitud y todo detalle, al menos si lo comparáis con lo que guarda, entre fotos y objetos, por ejemplo, el museo del castillo de Edimburgo.
No os la perdáis, sobre todo si sois público masculino.
No dudo que es un peliculón en todo lo técnico, increible, pero todo para mí era muy previsible.. perfecto los tiempos, seguimiento de cámara alucinante, todo de genio menos un guión con soluciones fáciles.. el bueno nunca quiere matar, lo hace para defenderse... para el ataque, se salva de todo a cual rambo.. bueno, lo dejo porque me váis a destrozar, lo se..
Totalmente de acuerdo