Crítica “La dama de oro”: Nazis saqueadores de arte

No por el hecho de que el nuevo film de Simon Curtis aborde de nuevo una historia de nazis y judíos implica que estemos ante algo ya visto previamente. ‘La dama de oro’ se enfrenta al tema pero desde la óptica de las obras de arte que fueron confiscadas indiscriminadamente al pueblo judío. Ello aporta originalidad a una historia real que emociona e instruye a partes iguales, teniendo como protagonista absoluta a una flamante Helen Mirren secundada magistralmente por el buen trabajo de Ryan Reynolds y Daniel Brühl.

Sinopsis “La dama de oro”

Maria Altmann (Helen Mirren) huyó de Viena durante la Segunda Guerra Mundial por su condición de judía. Sesenta años después regresa para reclamarle al gobierno austriaco las valiosas propiedades que pertenecieron a su familia en el pasado, entre ellas un famoso cuadro de Klimt. En su difícil y largo camino la ayudará el abogado Randy Schoenberg (Ryan Reynolds), y entre ambos lucharán férreamente no sólo ante el gobierno austriaco sino también ante la Corte Suprema de EE.UU.

Crítica “La dama de oro”

La actividad nazi no sólo estuvo dedicada a la masacre indiscriminada de judíos, sino que un capítulo destacable de su macabra historia estuvo centrada en el saqueo de sus propiedades y pertenencias. En este apartado, es importante resaltar que la apropiación de obras de arte tuvo una especial relevancia. Este precisamente es el contexto elegido para ubicar La dama de oro, el último film de Simon Curtis (‘Mi semana con Marilyn’, 2011). En él asistimos al caso real de Maria Altmann, una mujer judía encarnada por Helen Mirren que luchará con la ayuda de un joven abogado (Ryan Reynolds) por recuperar unas valiosas posesiones familiares que le arrebataron los nazis, la de mayor peso sin duda es el famoso cuadro de Gustav Klimt ‘Retrato de Adele Bloch-Bauer I’.

Simon Curtis vuelve a elegir por tanto un relato de no ficción para su nuevo largometraje, y se vuelve a lucir, dicho sea de paso. El guión de Alexi Kaye Campbell tiene fuerza y garra para conseguir atrapar al espectador con una historia humana que emociona al mismo tiempo que entretiene de principio a fin, lo que al fin y al cabo importa en esto del cine. El film se centra en la lucha de Maria Altmann pero acertadamente la narración no sólo se sitúa en la época presente. Con acertados flashbacks (los cuales se lucen entre otras cosas por el buen trabajo de fotografía de Ross Emery, quien introduce diferentes tonalidades entre las dos épocas en las que se enmarca la historia para dotar de mayor realismo a la recreación histórica) el espectador se asoma a su pasado, y lejos de servir para rellenar la historia, se profundiza en la psicología de Maria Altmann para comprender mejor los motivos últimos de querer recuperar el valioso cuadro.

Simon Curtis dirige con acierto la función y donde mejor se luce quizá sea en el apartado de la flamante dirección de actores, donde todos están a la altura de Helen Mirren, cuyo trabajo es sin duda uno de los mayores atractivos de la cinta. No cabe duda de que ‘La dama de oro’ no pasará desapercibida por ser un entretenimiento de calidad, teniendo en cuenta además que se acerca a la temática nazi desde una óptica menos explotada temáticamente que la convencional. Que ustedes la disfruten.

Trailer “La dama de oro”