Christophe Offenstein se estrena como director con la película “En solitario” (2013) que llega este primer día del 2014 a los cines españoles. Una inestable y poco emotiva aventura en alta mar que tendrá como protagonistas a un François Cluzet, como siempre magnífico, y a un joven polizón.
Sinopsis de la película “En solitario” (2013)
Participar en la famosa y reconocida Vendée Globe, una arriesgada y frenética regata que dará la vuelta al mundo a vela en solitario y sin escalas, es para Yann (François Cluzet) un gran reto por superar. Por azares del destino su sueño de embarcarse en esa gran aventura marítima se hace realidad… ahora está al mando de su propio velero y todas las decisiones que tome marcarán su destino para bien o para mal. Ahora están solos él y el mar.
Tras varios días de dura competición su embarcación sufrirá un imprevisto que hará a Yann detenerse en Cabo Verde, quedando en clara desventaja con el resto de participantes. Allí, sin ser visto, un joven polizón subirá a bordo de la embarcación y el rumbo de dicha competición marítima cambiará para siempre.
Crítica de la película “En solitario” (2013)
Christophe Offenstein se estrena como director con la película “En solitario” (2013) que llega para inaugurar la cartelera de nuestro país en este 2014. Una película sobre la superación personal y el lado más “humano” de los deportistas de alta competición que nos intentará transmitir una extraordinaria aventura en alta mar, cerca de parecerse más a un documental que a un largometraje. La famosa regata Vendée Globe será la excusa perfecta para embarcarnos en un fastuoso recorrido visual donde sólo existe un verdadero protagonista: la mar.
Y es que Christophe Offenstein aún le queda mucho por aprender como director, muchos son los puntos que no llegan a convencer de este “En solitario”, coescrita junto a Jean Cottin, pero lo que es indudable es que tras su larga experiencia es un verdadero maestro como director de fotografía (‘Pequeñas mentiras sin importancia’, ‘¿Y ahora adónde vamos?). En esta ocasión nos demostrará su maestría en alta mar a bordo de un barco de vela, un trabajo de rodaje nada sencillo, regalando al espectador un fabuloso recurrido transoceánico donde viviremos desde desasosegantes tempestades hasta las más relucientes puestas de sol.
Pero lamentándolo enormemente he de señalar en esta crítica de la película “En solitario” (2013) que no llega a cubrir las expectativas que despierta… ni logra embarcarnos en el apasionante y durísimo mundo de alta competición, ni logra convencernos de la relación fraternal que se “crea” entre Yann (François Cluzet) y su desvalido polizón (Mano Ixa), ni tan poco llega a transmitir la nostalgia por la familia y la amargura de la soledad. Esa falta de conexión entre lo que el director intenta transmitirnos y lo que realmente sentirá el espectador hará que la cinta navegue sin rumbo fijo no logrando despertar ningún tipo de emoción ni pasión. El final será todo lo previsible que nos podamos imaginar desde un principio y la gran aventura de Yann acabará pasando totalmente desapercibida.
